La consejera de Educación, Manuela de Armas, ha situado este martes “el problema grave” del acoso escolar a la salida de los centros educativos, ya que dentro los alumnos “están protegidos” por la figura del coordinador de bienestar y protección y por los protocolos establecidos.
De esta manera ha respondido Armas a la diputada del grupo Nacionalista Beatriz Calzada, quien le ha pedido una revisión de los protocolos anti acoso y la profesionalización de esa figura del coordinador de bienestar y protección, habida cuenta de que esa responsabilidad recae sobre maestros y profesores.
Calzada ha hecho hincapié en que los casos de acoso escolar aumentaron un 22% el año pasado y en que en algunos casos se está demostrando que el protocolo no funciona, y que las familias afectadas sienten que “el sistema les falla” y acaban recurriendo como solución al cambio de centro escolar de sus hijos.
La consejera de Educación ha recalcado que los protocolos, que se aplican desde 2015, están dando “un resultado excelente, y cuando las cosas van bien, se mantienen” o, en todo caso, “se hacen revisiones”, a lo que se ha comprometido a finales de año bajo la orientación de esos coordinadores.
Sin embargo, ha admitido que se ha producido un incremento de los casos de acoso escolar, “pero el problema grave”, ha insistido, se está dando cuando los alumnos salen de los centros educativos.
De Armas ha recalcado también que los profesores y maestros, “con una formación adecuada, son las personas idóneas” para ejercer de coordinadores de bienestar y protección, figura con la que, por ley, ha de contar cada centro.
Armas lamenta el estado del centro especial Hermano Pedro
En respuesta a una pregunta del Grupo Nacionalista en la sesión de control del Pleno del Parlamento, Armas t ha lamentado este martes el estado en que se encuentra el centro de educación especial Hermano Pedro, ubicado en Tenerife, y ha prometido una inversión superior al millón de euros.
La consejera ha detallado que la próxima semana se adjudicarán las obras de carpintería, por algo más de 250.000 euros, se ha encargado a la empresa pública Tragsa la redacción de un proyecto integral de reforma de la fontanería y electricidad, valorado en más de 800.000 euros, y que se ejecutará antes de que acabe el año y un tercer contrato menor para actuar sobre las columnas.
Armas ha indicado que “lo importante” es que se va solucionar la situación y ha reprochado a la diputada Rosa Dávila (CC-PNC) que haya cursado una visita al centro.
“No hace falta que vaya, eso lo hace usted que va con cámaras, yo tengo otra forma de hacer las cosas, lo importante es que se va a resolver”, ha espetado a Dávila, afeándole que el “deterioro” de las instalaciones no viene de los últimos dos o tres años, lo mismo que la ausencia de salida de emergencia. “¿Eso es de ahora o de toda la vida?”, se ha preguntado.
Dávila ha invitado a la consejera a visitar el centro y observar sus “terribles condiciones”, que ha descrito como propias de una zona “recién bombardeada”, con un edificio apuntalado, la piscina cerrada, cristales en el suelo y sin salida de emergencia. También ha criticado que la Consejería tenía el año pasado un presupuesto de 855.000 euros “y no lo ejecutó” y no se trata simplemente de una obra de mantenimiento, “es una obra muy delicada”.