La Justicia ha prohibido a Enrique Ramírez, que presuntamente quemó a su ex pareja Antonia Cabrera y a la hija de ésta, acercarse a menos de 200 metros a la hermana de la agredida tras ser condenado por una falta de amenazas.
La titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Telde, Cristina Villa Cuesta, dictó este martes la sentencia provisional en la que prohíbe a Ramírez, además, comunicarse de cualquier forma con la denunciante Otilia Cabrera, y le obliga a estar localizado de forma permanente durante ocho días, según la sentencia.
Tras el juicio oral, la sentencia considera “probado” que el pasado 18 de agosto en horas de la mañana Otilia Cabrera se encontraba en casa de su madre en compañía de ésta y de sus hermanos cuando despertaron a Enrique Ramírez con la finalidad de hablar con él sobre “temas económicos”.
Comenzaron a discutir y en un momento dado Ramírez se dirigió a su ex cuñada y le dijo “no vas a caminar más, te voy a cortar las piernas, ten cuidado con tus hijos y cuídate las espaldas”, según los testimonios de uno de los hermanos y de la madre, quienes estaban presentes cuando sucedieron los hechos.
Se da la circunstancia de que el autor de la falta de amenazas se encuentra desde el pasado 14 de octubre en la cárcel de Salto del Negro en situación de prisión preventiva por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa contra Antonia Cabrera y la hija de ésta de ocho años de edad, quienes fueron supuestamente quemadas por él.
De este modo, el abogado de Otilia y Antonia Cabrera, Ismael Rodríguez, explicó que la sentencia dada a conocer hoy responde a los formalismos que establece la Ley que da trato de “familiar” a Ramírez, quien, sin embargo, cumplirá la orden de alejamiento en la prisión, por lo que tampoco podrá comunicarse con ninguna de las dos.
Contra la sentencia dictada por la jueza cabe interponer recurso de apelación durante los próximos cinco días.