El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, se ha reunido este viernes en Santa Cruz de Tenerife con su alcalde, José Manuel Bermúdez, y con Jesús Soriano, soberano gran comendador del Supremo Consejo del Grado 33º para España, para acelerar la creación del Museo Masónico de Tenerife.
Este equipamiento se ubicará en el Templo Masónico de la capital tinerfena, cuya remodelación se encuentra en su última fase y ha contado con una financiación de tres millones de euros por parte del Ministerio de Cultura.
“El Templo Masónico de Santa Cruz de Tenerife será dotado con fondos bibliográficos y de toda índole para convertirse en museo. El objetivo es que sea visitado por la ciudadanía, para que se conozca la verdadera historia de la masonería, que fue fundamental para el desarrollo intelectual de nuestro país, y que fue perseguida durante los años de la dictadura franquista de una manera absolutamente ignominiosa”, ha señalado el ministro, que ha adelantado que, durante la reunión, se ha cerrado una “hoja de ruta”, con un borrador de convenio para el desarrollo del futuro centro museístico.
Torres ha anunciado, asimismo, que el ministerio ya ha solicitado al Archivo de Salamanca un listado de los fondos que fueron sustraídos del Templo Masónico de la capital tinerfeña durante la dictadura y que se encuentran en el centro salmantino.
Además, ha aclarado que celebrará una reunión con el máximo responsable del Archivo de Salamanca para impulsar el retorno de los fondos a Tenerife.
“Desde el área de Política Territorial queremos impulsar un decreto de descentralización, para conseguir que, no solamente las sedes y las agencias, sino también los fondos bibliográficos que pertenecen al acervo cultural, estén donde deben estar, que es donde se encontraban originalmente”, ha afirmado.
El Templo Masónico de la Logia de Añaza, de principios del siglo XX (1899-1902), está considerado el mayor templo de la masonería española construido hasta el Golpe de Estado de 1936.
El régimen franquista consideraba enemigos a los masones por sus valores progresistas y destruyó muchos de sus templos, resalta el Ministerio. “Por suerte, no es el caso del magnífico Templo de Santa Cruz de Tenerife, que ya está a punto de concluir su remodelación”, ha indicado el ministro.