El Consejo Consultivo se podrá renovar sin el PP

La Comisión de Gobernación ha dado este miércoles su visto bueno a que los 21 diputados del Grupo Popular no sean necesarios para la renovación del Consejo Consultivo de Canarias, que se podrá afrontar con los votos de nacionalistas y socialistas.

A falta de ser aprobado en el próximo pleno parlamentario, los grupos del Pacto han aprobado, con el voto en contra del Grupo Popular, la modificación de la Ley para que sus miembros solo necesiten tres quintos de los votos de la Cámara (36 diputados) para poder ser elegidos, en vez de la actual mayoría reforzada (40 diputados) actuales.

Los 40 diputados que eran necesarios para elegir a los nuevos miembros del Consultivo convertían al PP en un socio necesario para proceder a la renovación y, tras la negativa de los conservadores a participar en la misma, en minoría de bloqueo que, con la reforma, queda desactivada.

Un quórum que era el primigenio y que, sin embargo, se elevó por unanimidad en el año 2002, como recordó el portavoz del PP en la Comisión, Fernando Figuereo, al anunciar su oposición a la iniciativa del Pacto y la defensa de su enmienda.

“Es la primera vez en este Parlamento que una modificación alabada hace 9 años se modifica para hacer una nueva para mantener el chiringuito de un caudillo más interesado en defender los intereses de su partido que el de todos los canarios”, afirmó Figuereo en referencia al presidente Paulino Rivero y a los grupos del Pacto.

“Se menoscaba la imparcialidad”

Para el portavoz de los conservadores, la “perturbadora” modificación “menoscaba la imparcialidad” del Consultivo, por lo que es “peligroso para la democracia crear un antecedente de este tipo”.

El socialista Manuel Fajardo recordó al PP que “no nos debe dar lecciones de imparcialidad quienes, a nivel nacional han pasado de los dos tercios a la mayoría absoluta, sin pasar siquiera por los tres quintos, para elegir al presidente de RTVE”.

El socialista acusó a los conservadores de “menospreciar al Parlamento y a un Gobierno legítimamente constituido” y les recordó que “el respeto a las minorías empieza porque las minorías respeten a las mayorías”.

Bloqueo sistemático

Para Fajardo, la modificación propuesta no solamente homogeneiza la elección de todos los órganos dependientes de la Cámara sino que “solventa que un partido bloquee de forma sistemática desde hace más de cuatro años la renovación de un órgano”.

En parecidos términos, el presidente del Grupo Nacionalista, José Miguel Ruano, recordó que instituciones como el Tribunal Constitucional son elegidos por tres quintos del Congreso de los Diputados, y avisó a los conservadores que si no quieren participar en la renovación “se convertirán en un partido extraparlamentario”.

Como se recordará, la ruptura del consenso entre el Pacto y el PP se produjo el 18 de octubre de 2011, cuando la portavoz, Australia Navarro, pidió a CC y PSC que los conservadores, además de elegir al presidente de la Audiencia de Cuentas, pudieran tener un representante más en el Consejo Consultivo a costa de los tres que debe elegir el Gobierno.

Tras este porpuesta, no aceptada por nacionalistas y socialistas, el líder del PP, José Manuel Soria, pidió la desaparición de la institución del Diputado del Común y anunció que sus diputados se negaban a nombrar a ningún miembro al resto de las instituciones, lo que motivó que CC y PP anunciaran el 25 de octubre del pasado año la tramitación, por el procedimiento de urgencia, de la proposición cuya toma en consideración se ha acordado durante la sesión.

Mandatos homogéneos

En concreto, el nuevo texto que será ratificado por el pleno en la próxima sesión, asegura que el Consejo Consultivo de Canarias “está integrado por siete consejeros nombrados por el presidente de la Comunidad Autónoma de Canarias, cuatro a propuesta del Parlamento, por mayoría de tres quintos de sus miembros, y tres a propuesta del Gobierno, en ambos casos elegidos entre juristas de reconocida competencia y prestigio y con más de quince años de ejercicio profesional”.

Además, y para “homogeneizar” la duración de los mandatos, la reforma incluye que cuando “en dos sesiones plenarias diferentes del Parlamento” no se consiga la mayoría de tres quintos exigida, “se podrá proceder al nombramiento y toma de posesión de los consejeros propuestos por el Gobierno, continuando en funciones aquellos que hubieron sido designados en el período anterior por el Parlamento, hasta que se alcance la mayoría requerida y tomen posesión los nuevos que les sustituyan”.

El mandato de estos últimos “concluirá coincidiendo con la finalización del mandato de los que previamente hubiesen sido nombrados a propuesta del Gobierno”.