Aumentan los casos de 'mobbing'
La presidenta de la Asociación Canaria contra el Mobbing (acoso laboral), Carlota Rodríguez, afirma que no hay manera de convencer al Gobierno canario para que asuma competencias en esta cuestión que, comentó, ha aumentado con la crisis económica.
Esta asociación reclama que en Canarias haya un equipo multidisciplinar, al igual que ocurre en otras comunidades autónomas, formado por un técnico en prevención, un médico de trabajo y psicólogos, éstos últimos encargados de determinar si hay acoso.
El sistema funciona muy bien en otras comunidades autónomas, donde estos equipos multidisciplinares actúan como mediadores y filtran los casos de acoso a la inspección del trabajo, cuyo personal no está cualificado para determinarlo.
El acoso laboral, explicó Carlota Rodríguez, no se da sólo de forma vertical, de cargos superiores a inferiores y a la inversa, sino también horizontal, entre compañeros del mismo nivel, si bien son más frecuentes los primeros casos.
Además, el acoso laboral también afecta a los trabajadores autónomos, ya que hay casos en los que los empleados acosan al empleador, y Carlota Rodríguez recordó que en Canarias la gran mayoría de las empresas son pequeñas y medianas.
No hay legislación ni protección para las víctimas de acoso laboral
Carlota Rodríguez indicó que la situación está “bastante mal” en España por cuanto no hay legislación ni protección hacia las víctimas de acoso laboral, y sobre todo no hay concienciación social del problema.
La presidenta de la Asociación Canaria contra el Mobbing manifestó que en el último informe Cisneros, realizado por Iñaki Piñuel y Zabala, una de las máximas autoridades en la materia, se cifra en 2,5 millones el número de personas afectadas por situaciones de acoso laboral.
La también responsable del gabinete de riesgos psicosociales de CSIF en Tenerife señaló que, según ese informe de Iñaki Piñuel y Zabala, el acoso laboral se ha agudizado con la situación de crisis económica.
El aumento de casos de acoso laboral en España ha sido de un 70% desde 2007 hasta 2008 y 2009, y en los últimos años se ha observado un incremento de víctimas que son varones.
Hasta ahora el perfil de una víctima de acoso laboral era el de una mujer universitaria que trabajaba en grandes empresas, pero va en aumento el número de hombres que sufren este tipo de violencia, dijo Carlota Rodríguez.
En cuanto a la situación en Canarias, la presidenta de la Asociación Canaria contra el Mobbing explicó que la última encuesta la realizó en 2004 la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, y en ella se señalaba que sufrían acoso laboral el 17% de los trabajadores, uno de cada seis.
Respecto a qué se puede hacer ante situaciones de acoso laboral, Carlota Rodríguez consideró que hasta ahora el fracaso ha sido tratar los síntomas del problema, cuando lo que hay que hacer es atajarlo.
Para ello es preciso dar apoyo social a las víctimas, de manera similar a como ocurre en cualquier caso de violencia física y psíquica.
Carlota Rodríguez declaró que en otros países se han legislado de forma conjunta los acosos laboral y sexual, porque el procedimiento es el mismo, y lo que cambia es la definición de violencia, y añadió que incluso la Unión Europea tiene un protocolo de acoso sexual que ha pedido que se aplique en el laboral.
Comentó que las víctimas de acoso sexual son mucho mejor vistas que las de laboral, pues aseguró que en el segundo de los casos la mayor parte de la sociedad mantiene lo que se llama error de atribución y tiene a esas personas como verdugos, no como víctimas.
