MOSCÚ, 19 (EUROPA PRESS)
La Policía ha matado a todos los terroristas que han participado en el ataque perpetrado este martes contra el Parlamento de la república rusa de Chechenia, en el Cáucaso Norte, según han asegurado el presidente checheno, Ramzan Kadirov, y el viceministro del Interior, Roman Edilov.
Al menos seis personas murieron, entre ellas tres terroristas, dos policías y un funcionario, a causa del atentado perpetrado este martes cerca del Parlamento de Chechenia en Grozni, según informó un portavoz del departamento regional del Comité de Investigación de Rusia, citado por la agencia estatal de noticias, RIA Novosti.
“Murieron dos policías que custodiaban el edificio del Parlamento y un empleado de la Cámara”, indicó el portavoz. El ataque se produjo hacia las 8:30 locales (6:45 en España), después de que tres personas armadas entraran en el área del Parlamento.
El viceministro del Interior negó que, como se había dicho anteriormente, los terroristas hubiesen tomado rehenes. Una fuente de la Policía había declarado a RIA Novosti que el ataque comenzó cuando “un vehículo en cuyo interior había terroristas se dirigió hacia varios coches en los que viajaban diputados”.
“Uno de ellos se inmoló con explosivos y los otros dos fueron hacia el Parlamento”, explicó la fuente, que añadió que el Parlamento había sido evacuado y que había comenzado una operación especial ordenada por Kadirov para expulsar a los milicianos.
El presidente checheno, Ramzán Kadirov, y el primer ministro de Rusia, Vladimir Putin, han hablado telefónicamente sobre el operativo de las fuerzas del orden y las ayudas que se deben prestar a los heridos y a las familias de los policías muertos, según informó un portavoz del Gobierno ruso.
Por su parte, fuentes del Kremlin comunicaron que el presidente de Rusia, Dmitri Medvedev, quien se encuentra en Francia, ha sido informado sobre el ataque terrorista contra la sede del Parlamento de Chechenia.
Éste es el segundo acto terrorista grave ocurrido en Chechenia en los últimos meses, ya que el pasado mes de agosto, un grupo de terroristas suicidas llevó a cabo un gran atentado en la localidad natal del presidente regional, Tsentroi. Durante el gobierno de Kadirov, un antiguo miliciano que ahora es aliado del Kremlin, esta república rusa, donde hubo una brutal guerra separatista en los años 90 y otra a principios de la década actual, ha experimentado una calma relativa.