Los trabajadores de Guaguas rechazan el ''empeño privatizador'' del grupo de Gobierno

El Comité de Empresa de Guaguas Municipales de Las Palmas de Gran Canaria expresó este miércoles su “máximo rechazo” al “empeño privatizador” de la compañía pública por parte del gobierno del Ayuntamiento de la capital, al que acusó de cometer un “nuevo engaño” al apostar otra vez por vender acciones.

En un comunicado emitido, según se destaca, “ante el nuevo acuerdo del grupo de gobierno en la Comisión de Pleno celebrada hoy [por este miércoles] para cambiar el modelo de gestión de Guaguas Municipales y propiciar la entrada de capital privado”, el Comité de Empresa exige “una rectificación urgente”, al tiempo que avanza que estudiará adoptar medidas de presión, como hizo en ocasiones anteriores.

El cambio de actitud que se reclama a las autoridades locales “obligatoriamente pasa por sustituir a la actual presidencia del Consejo de Administración de la empresa y a su Gerencia, responsables intermedios de la deriva intencionada a la que están conduciendo a la empresa, además de la rectificación nítida y sin paliativos de Jerónimo Saavedra”, se afirma en el texto.

En él se critica que, con su iniciativa de este miércoles, “una vez más, el grupo de gobierno del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria vuelve a faltar a la palabra dada, e incumple sus propios compromisos en Pleno de garantizar el mantenimiento de la plena titularidad pública” de Guaguas Municipales.

Y es que se ha actuado “incumpliendo el acuerdo alcanzado para la finalización de la huelga indefinida, ante la demostración inequívoca del éxito, fortaleza y unidad de todo el colectivo de trabajadores de la empresa municipal”, recalcan los representantes de los empleados.

Denuncian, además, el hecho de que el cambio de rumbo se haya aprobado hoy, algo que aseguran que denota una “clara intención de camuflarlo en medio del periodo vacacional de Semana Santa”.

Por todo ello, insisten en exigir una modificación de una conducta que opinan constituye una “continua falta de respeto y consideración hacia la empresa, sus trabajadores, clientes y a la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria en general”.

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