Avalancha de reacciones contra las palabras del obispo de Tenerife sobre la homosexualidad

Canarias Ahora

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Desde que el pasado martes el obispo de la Diócesis Nivariense (la de la provincia de Santa Cruz de Tenerife), Bernardo Álvarez, hiciera unas declaraciones en la Televisión Canaria en las que comparaba la homosexualidad con el alcoholismo y la calificaba de pecado mortal, no han dejado de producirse reacciones en contra e, incluso, se han producido peticiones de cese o abrir una investigación.

Es el caso de CCOO Canarias, que ha pedido a la Fiscalía Provincial de Tenerife que investigue y actúe en consecuencia respecto a las palabras del obispo, al entender que podrían ser consideradas como un delito de odio.

En un comunicado, la organización sindical ha recordado que no es la primera vez que esta persona hace declaraciones polémicas. “Las reiteradas actuaciones y declaraciones de Álvarez son totalmente inaceptables y suponen un ataque frontal a la igualdad efectiva, la dignidad y la libertad individual que son derechos humanos adquiridos e inamovibles para todas las personas”, expone CCOO.

Además, el sindicato hizo especial hincapié en que “no se puede permitir que se menoscaben los derechos de ninguna persona y mucho menos por su orientación sexual”.

También UGT Canarias ha condenado el “discurso homófobo” del obispo, por lo que el sindicato le pide una rectificación inmediata de su “mensaje rancio y manido que pone de manifiesto el talante retrógrado de la que se considera la voz más autorizada” dentro de la Diócesis Nivariense.

“No entendemos cómo a día de hoy este tipo de discursos pueden seguir formando parte de esta institución, pero lo que menos podemos entender es la falta de responsabilidad del que se considera máximo representante de la iglesia en la isla”, señala Manuel Navarro, secretario general de UGT Canarias.

Navarro apunta, además, que “no es la primera vez que desde dicha institución se lanzan consignas de este tipo y cuyo calado social, y más si se hace a través de medios de comunicación, son importantes”.

Por otro lado, el director del Observatorio Madrileño contra la LGTBfobia y responsable de Internacional de la Federación de Organizaciones LGTB, Rubén López, considera que las palabras del obispo lo único que provocan es “dolor a los creyentes”.

Rubén López, que es vulcanólogo del Instituto Geográfico Nacional (IGN), asegura en declaraciones a los medios de comunicación que estas afirmaciones “hacen mucho daño a mucha gente creyente y lo único que hacen es perjudicar”.

Por ello, indica que las rechaza plenamente y las condena pues, insiste, lo único que hacen es generar dolor a quien cree

Asimismo, admite que le apena que se siga “a estas alturas” y “en pleno siglo XXI” con este tipo de declaraciones.

El presidente del Gobierno de Canarias también rechazó este miércoles las palabras del obispo. Ángel Víctor Torres las calificó de “inaceptables” y aconsejó al obispo “salir y saber en qué mundo vive”, ya que, añadió, la homosexualidad y la heterosexualidad “son semejantes en respeto, ninguna está por encima ni por debajo de la otra”.

Añadió, en una entrevista a la Cadena Ser, que se ha “caminado mucho” y “ha costado mucho conseguir derechos de igualdad para que se diga ahora que es una enfermedad o un pecado mortal”. Por ello, consideró que el obispo debería rectificar, ya que entiende que “le hace poco favor a la Iglesia esas declaraciones”.

La Asociación LGBTI Diversas tachó de “casposas y mezquinas” las declaraciones y ha pedido su cese. Además, la organización ha recordado que no es la primera vez que el obispo tinerfeño desata la polémica por sus “vergonzosas declaraciones”, pues ya en el año 2007 justificó los abusos sexuales a personas menores en una entrevista al periódico La Opinión, indicando que “hay niños que provocan”, además de señalar que “la homosexualidad perjudica a las personas y a la sociedad”.

Críticas y amplio rechazo en redes

Además de las condenas por la vía ordinaria, las redes sociales se han llenado de comentarios de rechazo a las palabras del obispo. Desde políticos a título personal, hasta partidos, periodistas y personajes del mundo de la cultura han coincidido en su mensaje de rechazo a las ideas de Álvarez.