El Gobierno de Canarias reduce a menos de la mitad la sanción prevista para Cuna del Alma por destruir un yacimiento

El Gobierno de Canarias ha abierto un nuevo expediente sancionador a la promotora del megaproyecto turístico Cuna del Alma, en el Puertito de Adeje, por destrozar un yacimiento. La Dirección General de Cultura y Patrimonio Cultural del Ejecutivo autonómico impondrá a la empresa Segunda Casa Adeje S.L. una multa de 229.503 euros por provocar un daño arqueológico irreversible en este enclave del sur de Tenerife. Sin embargo, esta cuantía es muy inferior a la que propuso el Gobierno regional la legislatura pasada, cuando pidió una sanción de 600.000 euros por una infracción ''muy grave''.

El Gobierno de Coalición Canaria y el Partido Popular dejó caducar este primer expediente, elaborado por el área que dirigía en el gobierno anterior Nona Perera (Podemos). El documento, emitido el 31 de agosto de 2022, venció el 31 de agosto de 2023, poco más de un mes después de que Miguel Ángel Clavijo tomara posesión como nuevo director general.

Los dos expedientes coinciden en que el daño provocado en el yacimiento por la construcción de 420 villas turísticas es ''irreversible''. Sin embargo, mientras que el primer documento advierte de un daño ''muy grave'', el segundo lo reduce a ''grave''. ''Se ha verificado la afección a 620,20 metros cuadrados'' de un yacimiento arqueológico con la ''destrucción total'' de 79,99 metros cuadrados en una de las zonas estudiadas, ''la de mayor valor patrimonial''.

A la sanción económica propuesta se suma la obligación de reparar los daños causados al patrimonio cultural mediante ''órdenes de ejecución destinadas a restituir el yacimiento a su estado anterior en la medida de lo posible'', reza la documentación oficial consultada por este periódico.

El Gobierno de Canarias constató en la pasada legislatura la “intencionalidad” de la promotora al realizar las obras “sin el correspondiente informe favorable (sobre patrimonio arqueológico) del Cabildo de Tenerife, sin el asesoramiento de un arqueólogo a pie de obra, sin tener en cuenta las conclusiones aportadas por la intervención arqueológica que la propia empresa había encargado y con pleno conocimiento de la existencia” de elementos arqueológicos y etnográficos.

La propuesta de sanción se fundamenta en la Ley de Patrimonio de Canarias, que califica como infracciones muy graves la destrucción o alteración significativa de un yacimiento arqueológico, no adoptar medidas de protección, omitir el cumplimiento del deber de conservación cuando dicha omisión suponga daños muy graves y alterar o manipular yacimientos arqueológicos.

El documento anterior tildaba el comportamiento de la promotora de ''doloso'' y ya advertía de que la empresa no puede alegar desconocimiento de la existencia de estos yacimientos, ya que aparecían recogidos en los estudios encargados por la propia promotora. En esta línea, el nuevo expediente reconoce que la destrucción impidió la correcta valoración científica del yacimiento, ''afectando al conocimiento del poblamiento prehispánico del sur de Tenerife''.

La empresa vulneró la suspensión cautelar

Las obras de Cuna del Alma fueron paralizadas de forma cautelar en mayo de 2022, después de que el Cabildo de Tenerife comprobara, a raíz de una denuncia de la Asociación Patrimonial Tegüico, la existencia de varios yacimientos arqueológicos que estaban siendo afectados por los movimientos de tierra que se estaban realizando en el entorno del Puertito de Adeje.

En la visita realizada el 24 de mayo, técnicos del servicio de Patrimonio de la institución insular identificaron dos grabados, dos estaciones rupestres que no estaban recogidas en el inventario insular de Bienes Patrimoniales. Además, la empresa promotora ya contaba con un estudio arqueológico que no entregó y que fue obtenido de manera extraoficial por los técnicos del Cabildo insular. 

La nueva propuesta de sanción responsabiliza a la promotora de Cuna del Alma de alterar y manipular yacimientos, de incumplir las obligaciones de control arqueológico y de incumplir las medidas cautelares. ''La empresa promotora desobedeció la resolución de suspensión cautelar de las obras dictada por el Cabildo de Tenerife, lo que permitió que continuaran las intervenciones en un área protegida'', indica la documentación oficial consultada por este periódico.

Un informe del 11 de octubre de 2022 certificó que se realizaron excavaciones en la zona bajo prohibición expresa, rebajando la cota del terreno y alterando la topografía del yacimiento. Otra inspección realizada dos días más tarde confirmó que se habían vulnerado las medidas cautelares ''con presencia de maquinaria pesada y personal trabajando en el área restringida''.

Dos expedientes más

Las obras de Cuna del Alma no solo destrozaron yacimientos, sino que también supusieron ''una amenaza inminente'' para la flora protegida y comenzaron sin una evaluación de impacto ambiental. Todas estas lagunas llevaron al Gobierno de Canarias a ordenar también en la pasada legislatura la suspensión de los trabajos. Sin embargo, en menos de un año se dejaron caducar dos expedientes y uno fue archivado.

En febrero de 2024, la Agencia Canaria de Protección del Medio Natural (ACPMN) archivó el expediente sancionador abierto contra la promotora por empezar las obras sin contar con una evaluación de impacto ambiental. La resolución, a la que tuvo acceso este periódico, anuló la sanción impuesta de 110.000 euros y tumbó la paralización cautelar de las obras dictada a finales de 2022. 

En verano de 2023, también caducó el expediente abierto contra la promotora por la amenaza inminente de daño ambiental sobre la flora silvestre protegida de la zona, ante la presencia de la viborina triste, una especie que tiene una protección especial dentro del Catálogo Canario de Especies Protegidas.

El actual consejero de Transición Ecológica, Manuel Zapata (PP), aseguró que volvería a iniciarlo. Poco tiempo después, el Gobierno de Canarias se declaró incompetente para decidir sobre la traslocación de la viborina triste y dejó esta decisión en manos del Cabildo de Tenerife. El presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo, ya lamentó en el Parlamento autonómico que, en clave urbanística, “si aparece un escarabajo o la viborina se paraliza todo”.