Ni el formato, ni la firma, ni la tipografía

Parece que el perito calígrafo designado por la juez no ha tenido muchos problemas para detectar la falsificación que se atribuye a José Luis Mena. El perito, dicho sea sin animus iniurandi, se llama igual que la consejera de Turismo, Rito Martín, y para realizar su pericia analizó nada menos que 22 documentos firmados por Mena, de modo que pudiera verificar la evolución experimentada por la firma del ex jefe del urbanismo teldense entre los años 2002 y 2005. La chapuza es de tal calibre que ni la firma coincide con la de Mena en 2002 (sí con la que empleaba en 2005), ni se utilizó el mismo formato de documento ni la misma tipografía que se emplea en el departamento de Urbanismo. Este elocuente hallazgo, que confirma que nos encontramos ante elementos sin el menor recato para saltarse el ordenamiento jurídico cada vez que es menester, no supondrá sin embargo que tenga que suspenderse el juicio contra Ildefonso Jiménez, pero todo apunta a que quedará absuelto y que se deducirá testimonio de inmediato para que se aclaren estos delitos de falsificación y de falso testimonio en una instrucción penal.