No podía ser de otro modo, y en su contra, va y declara el concejal Sosa que tamaña cantidad de negocio era el que había cifrado en un informe Canterías de Arucas, la empresa que se dedica a esos menesteres (a asesorar y a la explotación de canteras de piedra ornamental) y que mantiene una vinculación directa con Juan Medina, socio de Antonio Luis Medina, el ex diputado del PP que maneja todo el tinglado de las cuadrículas desde que supo del chollo tras su paso por el Congreso de los Diputados. 80.000 millones, para que se hagan una idea, es más que la operación de compra de la cadena de Ahold en Canarias, y más que la compra de Riu por parte de Lopesan-Satocan. Quizá sea mejor inclinarse por la teoría según la cual a Teodoro Sosa lo han sorprendido en su buena fe y lo han engañado, porque él no iba a engañar a la jueza, ¿verdad?