Como habrán podido leer estos días, Madrid ya ha dicho que el asunto del gas ha de producir ciertos estudios de viabilidad. Era de prever, no en vano esas centrales que se prentenden, al pertenecer a la red nacional, precisan de autorización administrativa. Es competencia del Gobierno de Madrid decidir si se hacen y cuándo, de acuerdo con Endesa. Al tiempo, Cepsa, que no va a consumir gas, sí está en el programa de almacenamiento y suministro del combustible. Pero es Endesa quien va a necesitar ese gas para cumplir el compromiso de Kioto. El convenio de Endesa y Sodecan puede ser papel mojado cuando quieran Endesa y el ministro Montilla. O sea, repetimos, el ministro de Industria, por mucho que Endesa sea una empresa privada.