Hubo debate interno cuando en este periódico se estudiaba la posibilidad de introducir un servicio de información necrológica. Más que nada porque hay opiniones que defienden que se trata de una información tan sumamente delicada que se puede prestar a sentimientos encontrados. Vencieron las tesis de que se trata de un servicio útil, y el tiempo lo está demostrando. Cada día se cuentan por centenares los que acuden a nuestra sección de necrológicas (que pueden encontrar en la portada del periódico) para hacer alguna consulta o utilizar alguno de los mecanismos de que dispone. Uno de ellos es el de envío de telegramas a los familiares de los difuntos utilizando esta sección. Hasta la fecha la estadística arroja que el mayor número de telegramas se produjeron como consecuencia del fallecimiento de la madre del presidente Rodríguez, y de la muerte de Pedro Lezcano. Pero es que este viernes la noticia ha estado en que a través de este servicio se ha podido enviar un telegrama de condolencia desde Paraguay. Es una de las ventajas de operar en Internet, que permite hacer cosas en tiempo real desde cualquier parte del mundo. Por cierto, como dato significativo, la remitente fue una monja, lo que confirma que la Red de redes llega a todos los rincones.