La cena familiar más ácida en 'Animales de compañía'

MADRID, 21 (EUROPA PRESS)

La comedia dramática 'Animales de compañía' aprovechará el clima navideño para presentar un retrato “corrosivo” de la familia como institución. “Me parece un buen filme para esta época de cenas familiares”, bromeó el director Nicolás Muñoz que estrena su cinta este miércoles.

Esta pequeña producción, “de bajo presupuesto”, rodada en tres semanas en un único decorado, se estrenó en el festival Seminci 2008 y pasó por diversos certámenes cinematográficos como el de Valladolid y el de Toulouse.

En 'Animales de compañía', el empresario Rafa (Miguel Rellán) cumple 65 años y sabe que las cosas salen siempre peor de lo que uno espera. Sabe que su hijo pequeño, Javier (Javier Pereira), llegará tarde a la cena de su cumpleaños; que su hija mediana, Sofía (María Botto), irá sin regalo; que su hija mayor, Esther (Cristina Alcázar), y su marido (Francisco Boira) no van a parar de meter cizaña sobre la hija mediana; y que su mujer, la fotógrafa Martina (Mireia Ros), intentará simular todo el tiempo que son una familia perfecta. Para colmo, el novio de Sofía, Gregorio (Nancho Novo) aparecerá para provocar aún más tensión a esta cena.

TEATRAL E IRREVERENTE

“Es una obra muy teatral, se podría hacer una adaptación a los escenarios”, puntualizó Nancho Novo, quien confesó estar “contento” por poder hacer un personaje de comedia. “Es divertida, cañera y con mucha mala leche”, detalló el actor.

Eso sí, se trata de una comedia “corrosiva, inteligente e irreverente”, según María Botto, pareja de Novo en el filme. “Buscamos hacer personajes realistas, de verdad, que actuaran con la mayor naturalidad posible”, detalló Rodrigo Muñoz, hermano de Nicolás Muñoz y coguionista junto al director.

Muñoz, cuya última película como director fue 'Rewind', de 1999, cree que pequeñas producciones como 'Animales de compañía' sirven de “cantera” para el cine español. Por su parte, Mireia Ros declaró que es una película “que hay que defender en tiempos de esta nueva Ley del Cine”. “No debemos comprar sólo en grandes superficies, me gusta comprar también en los colmados pequeños, más cercanos”, comparó la actriz.

“El cine pequeño está claramente amenazado. Necesitamos una base de películas”, advirtió el director, mientras que Ros destacó que “el cine en general está muriendo” y que el Ministerio de Cultura “tiene que estar pendiente” del séptimo arte.

PACTO DE SANGRE

Nicolás y Rodrigo Muñoz, hijos de la pintora Lucía Muñoz, afirmaron que su familia (“bastante peculiar”, puntualizaron) todavía no ha visto el filme. “Tengo bastante miedo a la Nochebuena, pero creo que la tomarán con buen humor”, bromeó el director. “Pese a todo, hay algo que resiste a todo en la familia y los personajes se dejan seducir por esta institución”, puntualizó el guionista.

“Vengo de una familia numerosa, que tenía dramas tremendos como los de la película”, reveló Mireia Ros. “Dentro de cada una hay un pequeño mundo que reúne todos los sentimientos buenos y malos, pero, al final, hay una especie de pacto de sangre que hace que las familias sigan adelante”, detalló la actriz. “Por mucho que se rían de la familia, es un pilar fundamental y confío en ella como institución”, concluyó el director.