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Micheletti garantiza que no intentará sacar a Zelaya de la Embajada de Brasil

El máximo responsable del gobierno golpista en Honduras, Roberto Micheletti, garantizó este martes al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que no intentará sacar por la fuerza al mandatario depuesto, Manuel Zelaya, de la Embajada de Brasil, donde se encuentra refugiado desde que llegó este lunes por sorpresa a Tegucigalpa.

“Nosotros vamos a respetar su sede porque esa es la tierra de Brasil”, dijo Micheletti en declaraciones a la prensa local desde la Casa Presidencial. Pero ha dejado claro que no intervendrá en la sede diplomática “siempre y cuando ellos (Brasil) contesten a nuestras peticiones”, las cuales no especificó.

Desde Nueva York, Lula pidió este martes a los “golpistas” que “no entren a la embajada brasileña” en Tegucigalpa y defendió su decisión de permitir a Zelaya refugiarse en esas instalaciones, porque su gobierno está haciendo “lo que cualquier país democrático haría”.

Las fuerzas de seguridad dispersaron esta madrugada a cientos de simpatizantes del mandatario derrocado que se encontraban frente a la embajada, generando fuertes disturbios pese al toque de queda impuesto por Micheletti. La Policía estima que unas 200 personas han sido detenidas por no acatar el estado de sitio y por participar en las manifestaciones.

El presidente de facto descartó que, por el momento, vaya a tomar alguna decisión sobre las relaciones que mantiene Honduras con Brasil y dijo que han estado “reflexionando sobre el tema” tras conocer que Lula había permitido a Zelaya permanecer en su embajada.

Micheletti dijo que Zelaya puede estar en la sede diplomática brasileña “de 5 a 10 años” si así lo desea, pero le instó a entregarse a las autoridades hondureñas para enfrentar los cargos que tiene por presuntos delitos de corrupción e incumplimiento de la Constitución.

Aunque también insistió en que las autoridades brasileñas deben decidir si dar asilo político a Zelaya o entregarlo a la justicia hondureña para que responda por los delitos que se le imputan.

Así, Micheletti aplaudió el llamamiento que hizo este martes Lula a Zelaya a no dar argumentos que motiven a las autoridades interinas a invadir la Embajada de Brasil en Tegucigalpa. “Eso es lo correcto” porque no puede seguir “provocando más a la población ni incitando a la violencia desde la casa de un país hermano”, aclaró.

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