Compromiso de ETA con los mediadores internacionales
La banda terrorista ETA se compromete con la Declaración de Bruselas, en la que mediadores internacionales le solicitaron un alto el fuego permanente y verificable hace casi seis meses, según informa el diario Gara, que se hace eco de un extenso comunicado de los terroristas que publicará en su próxima edición.
El diario abertzale ha adelantado así “un extenso comunicado” de la banda en la que según se explica “muestra su respeto y agradecimiento a los firmantes de la Declaración de Bruselas” del pasado marzo, donde en concreto se le solicitó a los terroristas un alto el fuego permanente y verificable, al tiempo que pedían al Gobierno una respuesta adecuada.
Fue a finales de marzo cuando un grupo de destacados mediadores internacionales entre los que se encontraban varios premios Nobel de la Paz reunidos por el asesor de la izquierda abertzale, Brian Currin, pidieron este paso a ETA y al Gobierno que respondiera con gestos.
Este movimiento de ETA llega trece días después de que en otro escrito diese a conocer su decisión de poner fin a sus acciones armadas ofensivas adoptada meses antes.
Ahora, según Gara, la banda manifiesta que “ante la cerrazón de Francia y España, ETA ha hecho zarpar de nuevo el barco de la oportunidad para la resolución democrática del conflicto. Y ha tomado la primera decisión sin echar el ancla, con disposición de navegar en aguas más profundas”.
Este nuevo comunicado de ETA está dirigido en especial a la comunidad internacional para subrayar que para superar el conflicto, “más allá de pasos parciales”, es necesaria “una propuesta integral”. Considera que la solución debe construirse con los compromisos de todas las partes y debe desarrollarse mediante la negociación.
Después de mostrar su disposición a establecer los compromisos que debe adoptar ella misma, ETA reitera su llamamiento a la comunidad internacional a que impulse y participe en el proceso para resolver de forma “permanente, justa y democrática este secular conflicto”, aunque entiende que “la clave de la solución está en Euskal Herria”.
