José Luis Rodríguez Zapatero, sobre memoria histórica: “Fue una de las leyes que más expliqué al rey emérito”

Si hay dos cuestiones en las que el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE) asegura que nunca encontró entendimiento con la derecha española estas son el nacionalismo en España y la Ley de Memoria Histórica. Esta norma se aprobó en 2007 recogiendo el reclamo de las asociaciones que se habían constituido años antes por todo el país por parte de hijos y nietos de los represaliados del franquismo. “Esta fue una de las leyes que más expliqué al rey emérito”, recuerda Zapatero como “anécdota” que siente en la obligación de contar ya que se trata de un testimonio para la historia. El expresidente define en el programa Trópico Distópico, de Radio Televisión Canaria, esa ley como “moderada”, por lo que cree que el PP, que tanto la criticó, no se leyó la exposición de motivos en los que se hacía referencia a la transición, a la reconciliación, a las víctimas, pero también a los exiliados españoles. “Un país que expulsó a muchos de los mejores es un país que tiene que hacer una autocrítica”, remarca. “¿Por qué a una derecha democrática le va a parecer mal quitar una calle a un general golpista?”, se pregunta.

Zapatero cree que la exhumación de Franco del Valle de Los Caídos el 24 de octubre de 2019 llegó “cuando la democracia quiso” y añade que en la transición hubo miedo e intentos de golpe de Estado. Sostiene que la ley de 2007 se lo debe todo a las asociaciones de memoria histórica y que representa dos cuestiones. Por un lado, políticamente es la primera vez que una ley reconoce el “derecho a la memoria personal y familiar ante la historia de sufrimiento en nuestro país” e históricamente establece la ilegitimidad de todos los actos del franquismo. No obstante, añade que es verdad que no contempló sanciones y que ha tenido un recorrido judicial a veces diverso. Asimismo, afea que el gobierno de Mariano Rajoy dejara sin financiación esta norma, que siempre contó con presupuesto hasta 2012.

Aquel fatídico día del padre

Pino Sosa perdió a su padre cuando apenas tenía 40 días de vida. Se llamaba José y era del barrio de Las Chorreras, en Arucas. Es la fundadora de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de ese municipio y tras una vida dedicada a encontrar a su padre y demostrar que no se marchó en un barco francés, como quería hacerle creer el gobierno franquista, localizó sus restos mortales en el pozo de Tenoya a donde fue arrojado junto a otros hombres por sus ideales.

En 2019 pudo, por fin, dar sepultura a su padre junto a otras familias que también localizaron en los pozos de Tenoya los restos de sus seres queridos. “Que no se olviden de que en Arucas fueron 66 demócratas a los que tiraron a los pozos por pensar de otra manera”, resalta en este programa. La fundadora de la asociación subraya que era muy duro ser “hija de rojos” en aquellos años, a quienes señalaban, vigilaban o negaban el trabajo y que la iglesia “ocupó el peor papel”. Además, remarca que hay muchos sectores de la sociedad como la propia iglesia o los falangistas que nunca han pedido perdón. Asegura que velará hasta sus últimos días para que se sepa lo que pasó y que no vuelva a ocurrir. Por ello, su asociación de memoria histórica tiene una exposición itinerante con la que trata de acercar a la sociedad a esta realidad.

María Antonia Salamanqués, psicóloga, señala que no es una cuestión de reabrir heridas porque “las heridas ya están abiertas” y que el entierro o celebrar algo simbólico es necesario para cerrarla. Para la historiadora Pilar Domínguez, lo que ha sido negativo en estos años es “el olvido impuesto en el franquismo”, que se empeñó en borrar todas las huellas de los vencidos, “un olvido que ha llevado a la tergiversación e la historia”. Ejemplo de ello, que relata también el historiador Ángel Viñas, es el mito sobre la igualdad en la violencia entre ambos bandos y que Canarias ejemplifica ya que no hubo una guerra como tal, pero sí mucha represión. Se trata de mitos que además se han perpetuado desde las escuelas y los medios de comunicación.

La historiadora apunta que la herencia franquista en las mujeres se percibe precisamente en esa falta de escolarización y en el trabajo infantil. Con 17 años empezó a trabajar Candelaria Moreno, exjefa del taller de la Sección Femenina de Moya. “A las mujeres nos educaron para servir a los hombres, para ser sumisas y era diferente”, afirma. Recuerda la posguerra como una época de pobreza, pero con la Sección Femenina de la Falange reconoce que tuvo trabajo y comida, después de hacer varios cursos en la Península para poder trabajar en el taller.

El PP quiere una ley de la concordia

El exsenador del PP Sergio Ramos asegura que su partido está promoviendo una “ley de concordia”. Está convencido de que el franquismo murió cuando falleció Francisco Franco y que hoy en día no se puede izar una bandera franquista (omitiendo que es gracias precisamente a la ley de memoria histórica que no apoyó su formación). “En la pandemia han muerto más de 100.000 personas, ¿Qué mensaje damos a la gente hablando de ese tema cuando Franco murió hace más de 40 años?, se cuestiona, mientras asegura que ”lo importante“ es encargarse del futuro de los nietos de las víctimas. ”Ningún nieto de nuestros abuelos está legitimado para deshacer el abrazo que se dieron nuestros abuelos en la transición“, remarca.

Lo cierto es que solo en Canarias se estima que hay más de 1.800 personas desparecidas, recuerda el secretario de la asociación para la Memoria Histórica de Arucas, Gregorio Arencibia. No obstante, los expertos insisten en que la gran fosa común de las Islas es el mar, por lo que podrían ser más las víctimas. Oficialmente, se tiene constancia de que hubo 123 fusilamientos y que solo en el día del padre de 1937 desaparecieron 63 personas, que fueron secuestradas de sus casas, torturadas y asesinadas.

Hacia la nueva ley de memoria democrática

Fernando Martínez, secretario de Estado de Memoria Democrática, señala que con la nueva norma se amplía el reconocimiento a las víctimas del franquismo. “Las víctimas de los vencedores fueron reparados desde el punto de vista económico, simbólico y se les tuvo en cuenta en la transición y, sin embargo, las víctimas de los vencidos estuvieron estigmatizadas e invisibilizadas”, apunta. Además, la norma condena el golpe de estado del 18 de julio y la dictadura franquista, incluye un banco nacional de ADN e incluye una novedad importe que es el reconocimiento de las mujeres.

¿Quién tiene que llevar a cabo el peso de las exhumaciones? ahora se establece que el Estado y no las familias. Asimismo, se establece un fiscal de sala para el conocimiento e investigación de lo que ocurrió en este período y su interpretación será en base al derecho internacional. “Es de pura humanidad lo que se plantea”, por lo que cree que no cabe oposición en un país democrático.

Planes de exhumación en Canarias

La arqueóloga e historiadora Verónica Alberto estuvo al frente de los trabajados de exhumación de la primera fosa en la que se hallaron restos mortales de represaliados en Canarias, en Fuencaliente. Explica que es muy importante la localización para recrear qué sucedió. Recuerda que la II Republica lo cambió todo y hubo clases sociales que empezaron a reclamar un espacio, por lo que se decide eliminarlos para causar el miedo y que no haya nunca más una intención de que ocurra algo similar.

Explica que en las exhumaciones que se han realizado en Canarias se han encontrado cuerpos con tiros en la cabeza y que es muy importante “la individualización” de los restos de los seres humanos ya que al caer los cuerpos a las fosas comunes se agrupan. Asimismo, detalló las dificultades de algunas intervenciones como las realizadas en los pozos, que hay que descender más de 40 metros, vaciarlos, lidiar con el peligro de que haya gases... Actualmente, hay proyectos de intervención en la Sima de Jinámar. el tubo volcánico al que fueron arrojadas decenas de víctimas del franquismo. Pero también la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Arucas prevé que se exhumen otros pozos en el municipio y que en Tenerife, su asociación por la Memoria Histórica, también promueve investigaciones para localizar a víctimas de la represión. De hecho, el Gobierno de Canarias ya ha publicado en el Boletín Oficial de Canarias (BOC) el protocolo para la localización, exhumación, identificación, conservación y reparación moral de los restos de las personas desaparecidas durante de la Guerra Civil y la represión franquista. Un documento que según anunció hace meses la viceconsejera de Justicia, Carla Vallejo es un instrumento que permitirá coordinar las actuaciones de los distintos profesionales implicados para lograr su agilidad, rigor, buena práctica y el respeto y acompañamiento psicológico a las familias afectadas.

“No tuve abogado, ni juicio justo y acabé en una fosa común”, es la historia repetida por miles de demócratas en España que fueron secuestrados, torturados y asesinados. España es el segundo país con más desaparecidos en una guerra civil.