Siempre lo consideró una persecución

Precisamente en su renuncia previa a la Brigada de la Policía Judicial se justifica en el entorno de Badenas la posterior destitución como comisario provincial de Las Palmas. Es decir, el comisario se considera víctima de un engaño por parte de la jefa superior, que le ofreció la jefatura para que renunciara a la Judicial y, ya incorporado al nuevo puesto, removerlo para recolocarlo en la jefatura de la Brigada de Información, donde ha prestado servicio hasta ahora. Considerado un buen profesional por amigos y enemigos, Badenas no ha logrado sintonizar con los dos últimos jefes superiores de Policía, Narciso Ortega y Concepción de Vega, asintonía que sus afines atribuyen a las veleidades sindicales del comisario, cuando en realidad se trata de una falta de química completa. Badenas deberá ahora ser nombrado comisario principal, con dependencia directa del número dos de la comisaría, cuya posición ante la jefa superior tampoco está muy católica.