Plenos municipales y escaramuzas

En las dos semanas siguientes a la toma de posesión de los 29 concejales del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, se han celebrado 4 plenos. Tres de ellos casi de trámite y uno, el del pasado 26 de junio, ordinario. En estas dos semanas ya se han iniciado las hostilidades entre gobierno y oposición, en forma de pequeñas escaramuzas.

A los pocos días de tomar posesión, el concejal de Urbanismo, Javier Doreste (LPGC Puede), denunció “la existencia de mil solicitudes de ayudas sociales (básicamente de alquiler y de emergencia) bloqueadas por la falta de la firma política de los anteriores responsables del PP”.

El Partido Popular desmintió a Doreste en un comunicado, rechazando que se hubieran dejado ayudas sociales sin firmar, cosa que hicieron hasta el último día. En Servicios Sociales, según el PP, se tramitan diariamente entre 50 y 100 expedientes.

Días después, Doreste matizó sus primeras declaraciones diciendo que “no estaríamos hablando de mil, pero sí de cientos” de solicitudes de ayudas sociales. O sea que, si estamos hablando de cientos y se tramitan diariamente entre 50 y 100 solicitudes, las ayudas sin firmar serían las correspondientes a los 6 ó 7 días desde la toma de posesión de los concejales del nuevo gobierno, que no habían firmado porque no tenían las competencias delegadas, y no porque el PP las hubiera dejado en un cajón.

Días antes del suceso anterior, la concejala de Igualdad, Diana Olga Mujica (LPGC Puede), hizo declaraciones diciendo que en el gobierno de Cardona “ha habido un recorte en materia de Igualdad de un 80% respecto al mandato anterior” (el de Saavedra), para a continuación decir: “vamos a intentar dar un giro de 360 grados en materia de Igualdad”. No sé si el recorte ha sido de la magnitud que dice la concejala, pero lo que sí garantizo es que si da un giro de 360 grados, se quedará igual que antes, pero mareada.

El alcalde recibió a la familia Kiessling, promotores de “El Poema del Mar” y confirmó que pondrá una “alfombra roja” a la inversión en el acuario. Dos días después, LPGC Puede emitió un comunicado en el que Javier Doreste se baja de la “alfombra roja” del alcalde, y dice que sí pero no. Que aunque no cabe anular ahora la exención fiscal que el Ayuntamiento hizo en el anterior mandato, su partido nunca ha apoyado la construcción del acuario.

Con estos antecedentes, se plantea un pleno ordinario en el que el PP solicita las comparecencias de la concejala de Igualdad para que explicase lo del recorte del 80% en Igualdad, y la del concejal de Cohesión Social para que explicara el bloqueo de las 1.000 ayudas sociales por falta de firma política. Además el PP también presenta una moción – por el procedimiento de urgencia, ya que no fue entregada dentro del plazo normal – en la que pide el respaldo unánime de la Corporación al proyecto del acuario “El Poema del Mar”.

Cuando las mociones de los grupos municipales en la oposición se presentan en tiempo y forma, se debaten y se votan. Pero cuando se presentan fuera de plazo con carácter urgente, sin entrar en el fondo de la moción, se abre un debate inicial en el que participan los grupos de la oposición y el gobierno municipal para ver si se justifica la urgencia del asunto a tratar.

Ésa fue la estrategia del gobierno municipal para que ni se llegara a hablar del contenido de la moción. No se vio la urgencia en tratar un tema como el del acuario, que ya tiene licencia de obra, está en fase de construcción y no hay ningún impedimento teórico. Y como el gobierno tiene mayoría, ganó la votación y no se trató la moción. El PP quedó en traerla el próximo pleno.

Con respecto a las dos comparecencias solicitadas, se aplazaron hasta el próximo pleno, como legalmente puede hacer el gobierno municipal.

El alcalde repite una y otra vez que “su equipo tiene una sola voz”, en referencia a que, aunque el gobierno está formado por tres partidos, actúan como uno. Hasta ahora, y han pasado menos de 20 días, la realidad no coincide con sus deseos. Algunos miembros de LPGC Puede se desmarcan con frecuencia, haciendo comentarios a la prensa sobre temas de los que, aparentemente, no tienen aún el conocimiento suficiente para hablar con propiedad. O en algunos casos, diciendo “sí pero no” o “no pero sí”, de forma contradictoria.

De seguir así, en este mandato municipal vamos a tener escenas muy divertidas entre los integrantes de LPGC Puede, el equipo de gobierno municipal y la oposición. Espero que solamente sean eso, escenas divertidas, y no nos cuesten dinero a los ciudadanos.