Tiene muy complicado el futuro presidente del Cabildo de Gran Canaria hilar su discurso de austeridad con el reparto de cargos que ya le están exigiendo sus socios de Coalición Canaria y del CCN. De entrada ya sabemos que habrá dos consejeros no electos, lo que elevará a diecinueve los miembros del grupo de gobierno, tropa a la que habrá que sumar asesores y asimilados hasta un número que tardaremos algunos meses en concretar para todos ustedes. Ya se sabe, por ejemplo, que Rosa Rodríguez ejercerá de vicepresidenta y que Melchor Camón será consejero de Turismo, lo que ya arrancó este viernes los primeros comentarios jocosos e incluso hirientes desde el sector. Se da por hecho que Bravo de Laguna recuperará para la política a Larry Álvarez, uno de los más insignes representantes de los damnificados soriásicos que abundan tanto dentro como fuera del PP. Se rumorea que Álvarez se hará cargo de la cartera de Cultura, lo que le alejará prudentemente de las tareas de fontanería que tantos enemigos le granjeó en nombre de José Manuel Soria.