Mientras el PP canario comprueba cómo van al banquillo otros ex cargos públicos en la segunda operación relacionada con la corrupción (la primera fue la trama eólica, por la que se sentará en el banquillo un ex director general a las órdenes de Luis Soria) en Madrid, Mariano Rajoy no encuentra un buen sitio donde guarecerse de la que se le viene encima. A los casos de presunta corrupción en Canarias, Baleares, Castellón, Galicia... se suma ahora la llamada operación Gürtel, la que investiga Garzón después de una denuncia presentada ante la Policía por dirigentes del PP que descubrieron hace más de un año comportamientos sospechosos en personas del entorno del partido. Ya ha dimitido un consejero del Gobierno de Esperanza Aguirre, el ex alcalde de Majadahonda (hasta este lunes gerente del Mercado de Puerta de Toledo) y en breve veremos quemarse a lo bonzo al de Boadilla del Monte. Si Góndola y Gürtel lo denunciaron personas vinculadas al PP, y la fiscalía, los jueces y la Policía sólo se han limitado a investigar, ¿dónde demonios está la conspiración socialista? A ver, Cospe; a ver, Pons; a ver, Soria, una explicacioncita, porfa.