Vecinos de la Patacona se oponen a una macrourbanización de 1.000 viviendas que solo apoya el PSPV
“La Patacona es una zona absolutamente saturada, que además se encuentra encajonada entre las vías del tren, la autovía V-21, el mar. Es como un cajón sin posibilidad futura de expansión y con pocos y malos accesos. En medio de tales circunstancias pretenden construir con el actual proyecto Vinival la barbaridad de 1042 viviendas, algo que significará un aumento de la población de entre 3.500-4.000 personas, y un aumento del parque móvil de 1700 coches, de los cuales unos 870 se tendrán que aparcar en la calle, aumentando y mucho, la competencia entre vecinos para conseguir aparcamiento. Además ese proyecto condenará a La Patacona a la masificación, con más contaminación, más tráfico, atascos, e inseguridad. El proyecto es cualquier cosa menos ecológico y sostenible, tal como el alcalde Miguel Chavarría y la promotora Metrovacesa pretenden hacernos creer”, señala la presidenta de la Asociación de Vecinos de la Patacona, Ana María López Roca, en relación al proyecto que tramita el Ayuntamiento de Alboraia gobernado por el PSPV, con el alcalde Miguel Chavarría al frente, con Compromís como socio.
El equipo de Gobierno está en minoría al contar los socialistas con siete concejales y la coalición valencianista con tres. Les faltaría por tanto un edil para alcanzar la mayoría. Partido Popular (siete concejales), Vox (dos), Esquerra Unida - Unides Podem (uno) y Alboraya Actúa (uno) complementan la Corporación municipal.
En este contexto, la urbanización que promueve Metrovacesa, al contar con la mayoría de la propiedad de los terrenos, pasó por la correspondiente comisión municipal, trámite previo al informe ambiental que realiza la Conselleria de Medio Ambiente, sin lograr siquiera el apoyo de Compromís, que se abstuvo. El resto de partidos votaron en contra. Por este motivo, Chavarría recurrió a un decreto de alcaldía para dar trámite a la Declaración Ambiental y Territorial Estratégica (DATE), que ha resultado favorable.
Aunque en un primer momento la conselleria requirió un acuerdo del pleno por mayoría, el Consistorio adjuntó un informe jurídico que certifica que no es legalmente necesario, puesto que será con la DATE y con el resto de informes finalizados cuando se someta a votación en el pleno, un paso imprescindible para que pueda salir adelante.
El proyecto abarca una superficie de 140.000 metros cuadrados de un entorno industrial abandonado junto a las antiguas bodegas Vinival. Sobre él se pretenden levantar 16 edificios con 1.042 viviendas, un 30% protegidas, en edificios de un máximo de entre 9 y 11 alturas, es decir, las mismas que los edificios del entorno. La concejala de Urbanismo socialista, Ana Bru, ha defendido la iniciativa: “La urbanización incluye 1.800 metros cuadrados en zonas verdes, 7.000 metros cuadrados para un colegio y 3.200 para un ambulatorio. También se prevé la creación de huertos urbanos como transición hacia la zona de huerta de Alboraia y un nuevo acceso norte desde la CV312”.
Según Bru, “se trata de ordenar una zona que está absolutamente degradada y abandonada, ganando dotaciones, incluso un centro social que se habilitará en las antiguas bodegas, cuya rehabilitación ejecutará Metrovacesa”. Sobre la falta de zonas verdes reclamadas por los vecinos, ha recordado que además de las que incluye el plan urbanístico el Ayuntamiento tiene en proyecto “un parque público de 90.000 metros cuadrados en Els Peixets”.
Por su parte, la concejala de Compromís, Conxa Villena, ha explicado sobre su abstención que consideran que “el proyecto debe reducir el número de viviendas y ganar zonas verdes y dotaciones” y que están trabajando en esa línea “para mejorarlo y que sea más sostenible”.
Desde Metrovacesa han destacado que han tratado de involucrar “a la comunidad local a través en un proceso en el que han participado más de 1.800 personas y que ha sido clave para que el proyecto mejore” en aspectos como “la reducción de las alturas de los edificios residenciales, la reserva de espacio para un supermercado o un nuevo acceso por el norte”.
Sin embargo, la presidenta de la entidad vecinal ha insistido en la necesidad de un gran parque en la trama urbana de La Patacona: “Como consecuencia de la nefasta política de urbanización liderada hasta ahora por las constructoras en connivencia con los políticos de turno, La Patacona se encuentra totalmente urbanizada, y dado que los terrenos de Vinival son los últimos que quedan por construir, si se desarrolla el proyecto previsto, nunca tendrá un parque donde nuestras familias, niños, jóvenes y jubilados, puedan jugar, quedar, practicar deporte, expandirse o socializar”.
Según López Roca, “la asociación de vecinos reclama un proyecto diferente acorde con sus necesidades físico-sociales, que provea a su población de los servicios que realmente necesita tales como, centro de salud, colegio, supermercado grande o mercado municipal, retén de policía local, dotaciones culturales; en resumen, lo que no queremos es un proyecto urbanístico especulativo como lo es el proyecto Vinival que solo busca la maximización de beneficios a favor de la promotora Metrovacesa.”
La entidad vecinal ha cuestionado también la transparencia de la tramitación del proyecto: “Llevamos más de dos años luchando para que se cancele el actual proyecto Vinival que solo lo quieren Metrovacesa y el señor Alcalde Miguel Chavarría, que desde que comenzaron con la pantomima de las 'sesiones de participación ciudadanas' hasta la actualidad, todo el proceso está plagado de sombras y tejemanejes que hemos venido denunciando incansablemente a través de nuestras redes y nuestra página web.”
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