La crisis turística exige que el plan que desarrolle la Ley de Directrices vaya rápido. Y va lento, muy lento, lleva mucho retraso. Y entre las siete islas, la de mayor paro, Gran Canaria, va en último lugar. Con ese sambenito y el fracaso que se augura -seguro- en ese plan, el consejero de Política Territorial del Cabildo es un valor que ya no cotiza en el bolsín. Pero volviendo al número, si no se cubrió el cupo es porque se puede cubrir con gente que no sean consejeros insulares. Pero no se hizo, insistimos. Entonces -pensamos- la razón hay que buscarla en que los que serán no están hoy disponibles. ¿Podría tratarse de Soria II y Australia Navarro, que en el otoño podrían quedar “a disposición del partido para lo que me quiera ordenar”? Si esto fuera así, ¿hay ya algún punto de contacto entre los intereses de Soria y los intereses del pueblo de Gran Canaria?