Y ya metidos en equilibrios y en despojos, ahí va otro. La viceconsejera de Turismo de Canarias, Pilar Parejo, ha tomado una interesante iniciativa ante Paradores Nacionales. Pero no se lancen ni se nos entusiasmen: no se trata de que por fin se reabra el establecimiento de Tejeda, que más parece la construcción de una catedral gótica. No. Ahora resulta que el Gobierno de Canarias está muy interesado en que la isla de Tenerife cuente con un segundo Parador Nacional, esta vez en La Laguna, que se sume al de las Cañadas del Teide. No está incluido el parador lagunero en la cada vez más amplia lista de reclamaciones empresariales, entre las que se encuentran -recordemos- dos aeropuertos, segunda pista para el Reina Sofía, Parque Nacional, cierre del anillo insular de carreteras, puerto industrial en Granadilla, qué poco vale ya el de Santa Cruz, y un tren que recorra la isla.