Pocas cosas nos faltan ya por ver de algunos políticos, especialmente los que se empeñan en hacer boba a la ciudadanía con mentiras y exageraciones de chiste. Pero, lamentablemente, muchas de esas trolas e hipérboles calan en la peña, muchas veces por ingenuidad, otras por necesidad de creer en algo, y la mayoría de las veces porque si sigue sirviendo el tocomocho, lo demás es coser y cantar. El Ayuntamiento de Las Palmas, por ejemplo, ha cogido recortes del pasado y ha reactivado de manera propagandística el asunto de las viviendas sociales. De ese modo es normal conocer a personas reclamantes de una casa de promoción pública que han sido llamadas estos días para acudir a las oficinas municipales “para arreglar los papeles para su vivienda”, como les explican a través del teléfono. A ver si les podemos contar de qué va exactamente el invento y si les acercamos algún caso concreto.