Los 'Detritus' de Francis Bacon
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
La exposición 'Detritus' reúne los restos que componen la intimidad del piso-estudio que el artista irlandés Francis Bacon poseía en Londres, para comprender así el universo del pintor y acercar su mundo y sus pensamientos al público. La muestra podrá visitarse en la galería Ivorypress Art + Books hasta el 5 de febrero de 2011.
Un total de 76 elementos como fotografías, dibujos, botellas vacías, bocetos, calendarios, fotografías, páginas de revistas, dibujos, instrumentos, cartas y notas del artista componen esta muestra, y en ellas se refleja la personalidad del pintor irlandés, su proceso creativo y el caos en el que creaba sus obras, en Reece Mews.
Francis Bacon (Dublín, 1909 - Madrid, 1992) vivía de una forma “extremadamente austera y económica”, según ha explicado este miércoles Elena Ochoa, comisaria de la exposición, durante su presentación. “Sorprende que el artista viviera en esas condiciones”, afirma.
Durante más de tres años ella y Brian Clarke se adentraron en la intimidad del pintor para preparar un libro, ya publicado, en el que incluyeron una reproducción de estos elementos, creados “individualmente y a mano”, usando técnicas especiales para hacer de cada uno de ellos “un nuevo original”.
Para ello, visitaron la casa de Francis Bacon, un “cubículo”, según lo ha descrito Ochoa, donde encontraron “los restos que dejó de su vida”, como la chaqueta de cuero que “siempre llevaba puesta”, y que dejó colgada en su apartamento cuando viajó a Madrid, último destino antes de su fallecimiento.
Unas escaleras “muy empinadas” accedían hasta la entrada de la casa, situada en una cocina “mínima” que a la vez servía de baño. Allí, unas estanterías guardaban bien colocadas todas las salsas que Bacon utilizaba para cocinar, justo al lado de un horno con el que se calentaba durante las épocas más frías. “Lo encendía todos los días durante el invierno”, indica Ochoa.
Además, en su mesilla de noche, recortes de obras de Velázquez demostraron su devoción por el artista español, en el que se inspiró en muchas de sus creaciones artísticas, en las que, según señala Ochoa, son protagonistas “el dolor y la sangre”. “Cuando llegaba a casa por la noche, después de beber, se ponía a trabajar hasta la una de la tarde del día siguiente”, señala.
CAOS ARTÍSTICO Y ORDEN VITAL
Uno de los elementos que describen a Francis Bacon siempre ha sido el “caos absoluto”, característica que el público conoce a través de las fotografías que se conocen de su estudio y de su lugar de trabajo. Sin embargo, Ochoa matiza que se trataba de una persona con un “orden y meticulosidad extraordinarios”. “Su cocina y su habitación estaban ordenados --sus gafas estaban cuidadosamente colocadas-- y el único elemento caótico era su agenda”, señala.
Asimismo, la autora de 'Detritus' destaca la humildad del artista a la hora de apreciar el valor del dinero. No lo guardaba en bancos, sino en su almohada. Para él, era un “utensilio para poder vivir como quería, comprarse whiskys y poder viajar. No quería vivir con lujos”, subraya.
Su vida fue “afectivamente y emotivamente tumultuosa”, pero consiguió la “dulcura del amor y la tranquilidad” con John Edwards, gran amigo --aunque nunca fueron amantes-- con el que compartió una relación muy especial. “Bacon le enseñó a leer y escribir”, señala.