Luis Mateo Díez inaugura la colección 'Fronteras' con 'Blasón de muérdago'
FronterasBlasón de muérdagoEl rastro de la ficciónCrónica de una angustia
Blasón de muérdago, de Luis Mateo Díez (Villablino, León, 1942), cuenta la ruina o naufragio de una estirpe y al mismo tiempo habla de la lucha por la dignidad y el orgullo personificados en don Senén. “Es sin duda el último habitante de un mundo que pretende subsistir”, subraya el autor de La mirada del alma.
En un encuentro previo con la prensa, Luis Mateo Díez confesó sentirse orgulloso de formar parte de esta colección Fronteras de Página Ediciones “ni más ni menos que en cualquier otra editorial de nuestro país”, un proyecto del que fue cabeza de cartel inaugurando, con un monográfico, la revista La Página que editan Hernández y Sinesio Domínguez. “Se trata de una edición muy reelaborada con la que me encuentro muy identificado”, afirmó el académico y autor de Laciana, suelo y sueño, porque se trata de una novela publicada en 1977 con el título Apócrifo del clavel y la espina.
Este escritor y académico de la Lengua Española desde el año 2000 cuenta con una extensa obra, en la que destacan libros como Las estaciones provinciales (1982), La fuente de la edad (1986, Premio Nacional de Narrativa y Premio de la Crítica), La mirada del alma (1997), El paraíso de los mortales (1998), La ruina del cielo (1999) o La piedra en el corazón (2006).
Tras la pista de la ficción
Mientras Luis Mateo Díez se centra en la dignidad y el orgullo, el burgalés Tomás Val se sitúa a caballo entre el cuento y el ensayo con ciertas escapadas al ámbito de la novela en El rastro de la ficción. Distintos episodios pseudohistóricos, hallazgos científicos desconocidos, teorías filosóficas tal vez jamás pensadas o momentos de biografías no vividas, junto con anécdotas y curiosidades realmente acaecidas, conforman el mundo narrativo de Tomás Val, heredero de grandes maestros, como Jorge Luis Borges o Ítalo Calvino.
Tomás Val nació en Marcillo de Bureba (Burgos) y lleva ejerciendo el periodismo cultural y el columnismo político desde hace más de veinte años. Ganador de diversos premios de narrativa, ha publicado, entre otras obras, las novelas La herencia de Ayala (Premio Ateneo de Valladolid en el año 1992), Llegada para mí la hora del olvido (1997) y El secreto del agua (2004).
Crónica de una angustia, del escritor tinerfeño Sinesio Domínguez Suria, abarca y sintetiza dos ideas: la lucha del personaje principal por ser independiente y tener voluntad propia, y la anécdota, el descubrimiento de la función zoofílica -contrapuesta a la clorofílica-, por la que un elemento del reino animal (el escarabajo negro de los egipcios ), genera el oxígeno que necesita el protagonista, pretendidamente loco, para resucitar sus fantasmas, sus amores, sus traumas, sus recuerdos y sus olvidos. Domínguez Suria (Santa Cruz de Tenerife,1944) es arquitecto técnico por la Universidad de La Laguna, profesión que compagina con su actividad literaria.