Investigadores estudian la energía que pueden generar en Canarias las olas del hemisferio sur para su aprovechamiento comercial

Dos investigadores de la Universidad de La Laguna (ULL) han analizado la energía que pueden generar las olas procedentes del hemisferio sur, “capaces de provocar inundaciones y daños en las playas y paseos costeros”. Sin embargo, tras el estudio en profundidad de este oleaje, “su fuerza aún no es rentable en el ámbito comercial”.

En una nota, la ULL explica que la llegada a las costas canarias de oleaje originado en el hemisferio sur es “más frecuente de lo que se percibe”. Este llega en forma de swell (mar de fondo), tras varios días de travesía, con alturas de ola mucho más pequeñas que en su origen y longitudes de onda muy largas. Estas dos características motivan que, por un lado, quede enmascarado por otras familias de oleaje de mayor altura generadas localmente, y por otro, que a pesar de la baja altura transporte energía “suficiente para provocar inundaciones y daños en las playas y paseos costeros”.

Este oleaje trans-hemisférico fue el protagonista de la tesis doctoral de Emilio Megías, cuyo director fue el profesor del Departamento de Ingeniería Civil, Náutica y Marítima de la Universidad de La Laguna Manuel García Román. Ambos investigadores han sido los autores de este artículo publicado en una de las revistas científicas del Colegio de Ingenieros más antiguo del mundo, el Institution of Civil Engineers británico (ICE), del que Emilio Megías es miembro.

En el artículo, los autores analizan la energía de este oleaje, y su posible aprovechamiento, mediante el uso de equipos convertidores de la energía de las olas, conocidos por su acrónimo anglosajón WEC (Wave Energy Converter). La novedad de este estudio recae “en la sencilla metodología llevada a cabo para la separación de este tipo de oleaje, muy maduro, y poder estimar su energía”, detalla la nota.

De esta forma se ha podido determinar su aportación al conjunto del estado del mar, representando el 6,6% del potencial total de energía undimotriz en la zona.

La investigación se basa en datos de 15 años (2008-2022) de la boya que Puertos del Estado tiene fondeada en aguas profundas al sur de Tenerife, complementados con datos de una boya virtual SIMAR cercana.

La energía de las olas depende fundamentalmente de su periodo y su altura y de un oleaje con grandes periodos como el estudiado, con periodos de pico mayores a los 14 segundos, se espera que contenga una gran cantidad de energía, pero esta es “penalizada” por sus pequeñas alturas, habitualmente menores a 1 metro.

Es por ello que, tras el estudio en profundidad de este oleaje los investigadores afirmen que “aún no es rentable su aprovechamiento en el ámbito comercial”, pero “sí resulta interesante su conocimiento para considerar el posible aprovechamiento conjunto del oleaje existente en las fachadas sur de las islas con otras fuentes de energía renovables, como es el caso de la eólica flotante en aguas profundas”, aseguran los investigadores en la nota.