La UE planta a Ahmadineyad por acusar a Israel de racista
El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, cumplió este lunes con los pronósticos y aprovechó su intervención en la conferencia de la ONU sobre el racismo en Ginebra para arremeter contra Israel, país al que definió de “racista”, lo que provocó que numerosos delegados abandonaran la sala en protesta y otros aplaudieran su intervención.
Durante su discurso, Ahmadineyad acusó a Occdiente de dejar “a toda una nación sin hogar bajo el pretexto del sufrimiento judío”, en referencia a los palestinos, con el fin de “establecer un gobierno totalmente racista”, informa la cadena CNN.
En su opinión, el sionismo “persofinica el racismo” y acusó a los israelíes de aprovecharse de los recursos políticos y económicos para silenciar a sus oponentes.
Sus palabras fueron recibidas con gritos por parte de algunos delegados, que acusaron al propio presidente iraní de ser “un racista”, mientras que otros delegados prefirieron abandonar la sala en la que se está celebrando la conferencia. Sin embargo, otros de los presentes aplaudieron su intervención.
Esta conferencia, de seguimiento de la celebrada en la ciudad sudafricana de Durban en 2001, ha sido boicoteada por Israel, Estados Unidos y varios países europeos, entre ellos Alemania e Italia, ante el temor --ahora confirmado-- de que serviría para arremeter contra Israel y no para denunciar el racismo, como es su objetivo.