Los Príncipes esperan otra niña

Los Príncipes de Asturias esperan para la próxima primavera el nacimiento de su segunda hija, informaron fuentes de la Casa del Rey.

Las citadas fuentes indicaron que el ginecólogo que atiende a la Princesa de Asturias en su segundo embarazo, Luis Ignacio Recasens, ha informado a don Felipe y doña Letizia de que el bebé que esperan será otra niña.

También los Reyes han sido informados por los Príncipes de Asturias de que su octavo nieto será una niña, agregaron las mismas fuentes.

El Príncipe don Felipe, en una conversación con periodistas durante la recepción con motivo de la Fiesta Nacional celebrada en el Palacio Real, comentó que él y su esposa no tendrían inconveniente en dar a conocer el sexo del bebé si se consideraba oportuno, si bien indicó que ellos personalmente preferían no saberlo.

Así ocurrió durante el embarazo de su hija y primogénita, la infanta Leonor, que el pasado 31 de octubre cumplió un año.

La hija que esperan los Príncipes de Asturias será la cuarta nieta de los Reyes de España, junto a su hermana doña Leonor y sus primas Victoria Federica de Marichalar e Irene Urdangarín, hijas de las Infantas Elena y Cristina, respectivamente.

Además, será la octava nieta de don Juan Carlos y doña Sofía, si a las mujeres se añaden los varones, Felipe Juan Froilán de Marichalar y Juan, Miguel y Pablo Urdangarín, vástagos de las Infantas de España.

Esta niña será la tercera en el orden de sucesión a la Corona de España, tras su padre, el Príncipe Felipe, y su hermana, la Infanta Leonor.

Declaraciones, sólo de IU

Desde el PSOE y el PP se declinó realizar este lunes por la noche ninguna declaración al respecto de la noticia mientras que desde IU se confía en que la noticia no suscite “debates falsos” en torno a la reforma de la Constitución en materia de sucesión, ya que lo que debe producirse -dijo- es un cambio en la Jefatura del Estado.

El responsable de modelo de Estado de IU, Félix Taberna, trasladó la felicitación de IU a los Príncipes tras conocerse que en la próxima primavera nacerá su segunda hija y les envió sus mejores deseos, aunque consideró que la noticia “debe ser tratada en el ámbito privado”.

La noticia aplaca el debate sobre la sucesión de don Felipe y retrasa la urgencia sobre la necesidad de modificar la Constitución para equiparar los derechos de mujeres y hombres en la sucesión a la Corona.

Desde la Casa Real se considera que la situación sobre la Reforma de la Constitución en lo referente al orden sucesorio no hubiera variado aunque el nuevo hijo de los príncipes hubiera sido un niño, porque la sucesión está garantizada en la actualidad con la figura del Príncipe.

La reforma de la Constitución, sin urgencia

El Gobierno se remitió este lunes a su posición conocida de que no hay ninguna urgencia para la reforma de la Constitución con independencia del sexo de los hijos de los Príncipes de Asturias.

Las fuentes del Gobierno señalaron, no obstante, la conveniencia de que haya una reforma constitucional para igualar a la mujer y al hombre en el derecho a la sucesión a la Corona, y recordaron que así se ha planteado a los partidos políticos y se confía en que haya un acuerdo con el PP.

En la actualidad, el artículo 57,1 de la Constitución establece que “la sucesión en el trono seguirá el orden regular de primogenitura y representación, siendo preferida siempre la línea anterior a las posteriores; en la misma línea, el grado más próximo al más remoto; en el mismo grado, el varón a la mujer y, en el mismo sexo, la persona de más edad a la de menos”.

El Consejo de Estado aprobó el pasado 16 de febrero un informe sobre la reforma de cuatro puntos de la Constitución: el orden sucesorio, la reforma del Senado, la definición de las Comunidades Autónomas y la adaptación a la Constitución Europea.

En este informe se dice que la “igualdad ante la ley de hombre y mujeres es un principio universalmente reconocido”, lo que considera base suficiente para eliminar del artículo 57,1 de la Constitución la preferencia del varón, “sin que sea preciso invocar otros argumentos”.

La preferencia por el varón en la Monarquía española responde, según el Consejo de Estado, a una tradición histórica que “comporta la pervivencia cierta de una discriminación de la mujer” que hoy, mas de 25 después de la aplicación de la Constitución, la “conciencia colectiva” considera inaceptable.

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