La Guardia Civil de Fuerteventura investiga a una joven de 20 años por contratar microcréditos por internet con la identidad de otras personas
La Guardia Civil de Fuerteventura ha investigado el 17 de mayo a una joven de 20 años como presunta autora de un delito continuado de estafa por contratar a través de internet, de manera fraudulenta utilizando la identidad otra persona, diversos microcréditos a través de varias financieras, así como utilizar la tarjeta bancaria de la denunciante para realizar compras en establecimientos, ocasionando un perjuicio económico de 4.326,96 euros.
La investigación LAGARGA se inició después de que la Guardia Civil tuviera conocimiento de los hechos ante una denuncia interpuesta en el mes de septiembre, en el que la víctima manifestó que había sido estafada porque habían empleado su identidad para contratar microcréditos y diferentes compras online, ya que diversas empresas financieras estaban realizándole cargos en su cuenta bancaria pero desconocía la procedencia de los mismos.
Además, y según ha informado la Guardia Civil en nota de prensa, la víctima expuso que le habían comunicado que se le iba a incorporar en una lista de morosos por deudas no pagadas con estas financieras.
Por todo ello, agentes de la Guardia Civil iniciaron una investigación para averiguar la procedencia de los cargos con las financieras comprobando que los mismos se debían a la contratación y firma “de manera fraudulenta” con las empresas de diversos micro créditos online, en los que se había utilizado la identidad de la denunciante para la contratación de los mismos.
Los agentes también comprobaron que se había utilizado su tarjeta bancaria para realizar compras en plataformas en Internet. Así, a medida que avanzó la investigación y siguiendo los rastros digitales que dejó la supuesta autora de los hechos, se pudo identificar, localizar e investigar como presunta autora de un delito continuado de estafa a una persona residente en Fuerteventura.
La Guardia Civil expone que la navegación en la red debe hacerse con cautela y autoprotección, siguiendo una serie de medidas para su uso seguro, “siendo la primera y la más importante de todas” el sentido común, unido a otras dirigidas a mantener seguros todos los dispositivos que tengan acceso a la red y a los portales de los que se hace uso.
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