Zebenzuí González y la lucha por poniente

Cuando en el mes de julio, como él mismo ha reconocido, Zebenzuí González, concejal del PSOE en el Ayuntamiento de La Laguna, mandó por error un WhatsApp con contenido machista a un grupo de contactos de la comarca nordeste de su partido no sabía la repercusión que ello iba a tener. El concejal ya es conocido en toda España por decir en tono “jocoso” que mantenía relaciones sexuales con empleadas del Ayuntamiento de La Laguna a cambio de “enchufarlas”.

La expectación sobre este caso se ha mantenido durante toda la mañana de este viernes. Primero, salió el concejal del “error” en Diario de Avisos afirmando que no dejaría su acta: “No voy a dimitir, ni hoy ni mañana”, y luego añadía que era necesario conocer el contexto de la conversación y que todo era producto de una manipulación y venganza por parte de miembros del PSOE, poniendo como principal responsable a Javier Abreu. De él dijo: “Javier Abreu está detrás de todo esto para conseguir una moción de censura”. 

A la vez que distintos miembros de la oposición, del PSOE y de Coalición Canaria rechazaban de forma rotunda el contenido de esos mensajes, Abreu no tardó en salir ante los medios para decir que no tenía el contenido de estos porque, “si yo hubiera tenido los WhatsApp, los hubiera enseñado yo mismo”. A esto se sumó un acuerdo unánime de todos los grupos políticos para pedir el cese “fulminante” de Zebenzuí González en todas sus responsabilidades del Ayuntamiento, cuando ya estaba suspendido de militancia.

Aquí esto se ha suspendido

El pleno previsto para esta misma tarde a las cuatro y media tenía todas las expectativas puestas en si al final el concejal aparecería o no a dar explicaciones, y en saber cuál sería la respuesta de Mónica Martín a lo ya dicho por Zebenzuí González.

Tras una hora y media de espera, quedaba aplazado el pleno. De forma unánime todos los grupos políticos fueron pasando para dar su versión de los hechos. Mónica Martín señaló que todo lo publicado por muchos medios sobre su conocimiento acerca de los mensajes “era totalmente falso” y quiso dejar claro que ni ella ni su compañera María José Castañeda formaban parte de ese grupo de WhatsApp, pues ha tenido “que estar preguntando anteayer y ayer” para conocer su existencia al no ser aquel un grupo oficial del partido.

Sin embargo, en el lado contrario del ring, se encontraba Javier Abreu, que afirmó haber visto a Zebenzuí González con Mónica Martín riendo y compartiendo confidencias junto al resto de miembros del ala oficialista al mediodía de este viernes en el Consistorio. Los entresijos del PSOE canario no tienen nada que envidiar a los capítulos de House of Cards o Juego de Tronos.

Abreu también ha dejado caer a los medios presentes que la postura de Martín es producto de intentar proteger su pacto con CC. Según Abreu, Martín era conocedora de los mensajes y, además, se los había mandado a Pedro Ramos. “Ella sabe quién le mandó el WhatsApp y ella se lo mandó después a Pedro Ramos. Lo que pasa es que todos se van de la lengua”.

Abreu ha dicho que existe un audio que demuestra que Martín y otros miembros del PSOE conocían los mensajes de WhatsApp e intentaban ocultarlos. También ha querido explicar que no era el momento de hablar de una posible moción de censura, sino de las razones que provocaron que esa misma tarde no se haya celebrado el pleno municipal. Todo ello, con el tono jocoso que caracteriza a Javier Abreu, que cerraba sus declaraciones subrayando que Zebenzuí González iba a tener unos “buenos Reyes”.

Para Martín, la afirmación de que el pacto de gobierno entre CC-PSOE estará en el aire en el momento en que Zebenzuí González entregue su acta es algo apresurado, y sostuvo que “el pacto de gobierno es un pacto que lleva firmado desde hace mucho tiempo y se mantiene. No veo por qué se va a romper”.

Por su parte, tanto el portavoz de Coalición Canaria como Antonio Alarcó, del PP, han manifestado que Zebenzuí González debe marcharse del Ayuntamiento. A la pregunta de una periodista sobre la posibilidad de que CC adopte al concejal, su portavoz lo ha negado tajantemente. Mientras, Alarcó prefirió disculparse con los medios por la espera, para después añadir que desde el PP van a “exigir, y no pedir, que se cumplan los tres puntos del acuerdo de los portavoces”.

Añadía que “las instituciones públicas no son de nadie, aunque algunos se creen que son de ellos. Somos meros administradores de lo público y tenemos una prerrogativa que hay que respetar”. Además, explicaba, algo molesto, que no era relevante que se hubiera sumado o no tarde al acuerdo, como a la reunión de esta mañana. Fue un intento de tirón de orejas al tuit del periodista Moisés Grillo, que publicaba en Twitter una foto donde señalaba que los grupos políticos estaban “esperando por el PP”.

No se pierdan los próximos capítulos porque la lucha por poniente continuará si finalmente sale publicado el audio que menciona Abreu.