El Cabildo reafirma el valor histórico de inmuebles que Santa Cruz permitirá derribar en el barrio de Miraflores

Edificio deteriorado y con valor histórico que está radicado en el entorno de Miraflores

Tenerife Ahora

Santa Cruz de Tenerife —

Un nuevo informe emitido por el Cabildo de Tenerife a petición de la Asociación Nuestro Patrimonio ha concluido, como ya se hiciera en 2007 y en 2010, que las manzanas del antiguo barrio de Miraflores, en la ciudad de Santa Cruz, “acogen varios inmuebles, algunos diseñados por los arquitectos más prestigiosos en la capital en la primera mitad del siglo XX (Pintor, Pisaca, Marrero Regalado), con unas características tipológicas y formales que les otorgan un indudable valor patrimonial”.

Por este motivo, segun concluye el servicio de Patrimonio Histórico del Cabildo, seis inmuebles en esa zona de la capital tinerfeña merecen ser incluidos en el catálogo municipal a tenor de sus fachadas, “sin perjuicio de la posible existencia de elementos de interés en el interior”.

Ese informe, fechado el 22 de agosto de 2017, fue solicitado por la asociación Nuestro Patrimonio tras conocerse hace unos meses que el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife tenía ya avanzado el proyecto de urbanización para las manzanas que delimitan las calles Miraflores, Juan Padrón, Carmen Monteverde y Puerta Canseco, donde van a demolerse todas las edificaciones antiguas, así como tras tener conocimiento de que en 2007 y 2010, en esa parte de la ciudad, el Cabildo ya había propuesto en otros dos informes la catalogación de inmuebles, entre los más de 500 que, sin éxito, pidió proteger por valores patrimoniales con ocasión entonces de la revisión del Plan Genaral de Ordenación.

El criterio técnico del Cabido no deja lugar a la duda: “En las manzanas que nos ocupan se reconoce la presencia de elementos constructivos ornamentales, de ambiente urbano o de carácter histórico, en los que se reconoce un interés patrimonial de consideración y los hace merecedores de ser protegidos y conservados”. Es el Ayuntamiento el que, sin embargo, tiene la competencia de decidir su catalogación, después de rechazarla en años anteriores.

En concreto, el Cabildo confirma que merecen catalogarse seis construcciones en el ámbito de Miraflores:

1) Inmueble 28 de la calle de Miraflores, conocido como Casa Clavijo, obra de Antonio Pintor y Ocete en 1908. De lenguaje ecléctico, con aporte historicista, con arcos de herradura de inspiracion neomudéjar y filigrana modernista. Adosada a esta vivienda existe otra de estilo ecléctico. En conjunto, se trata de dos edificaciones que, según el informe del Cabildo, “de forma taxativa debiera estar catalogado, por su magnífica fachada”.

2) Inmueble número 38 de la calle Miraflores, esquina con Juan Padrón, 27. Proyectado por Domingo Pisaca en 1951. De estilo ecléctico.

3) Inmueble 25 de la calle de Juan Padrón, esquina número 11 de la calle de Carmen Monteverde. De estilo ecléctico, pudiera ser atribuido a Antonio Pintor, con fecha en torno a 1910. Tiene elementos que le “confieren un interés patrimonial destacado”, según el nuevo informe del Cabildo.

4) Inmueble 21 de la calle de Juan Padrón, esquina número 29 de la calle de Puerta Canseco. Proyectado por Enrique Marrero Regalado en 1949, en lenguaje racionalista; fue reformado en 1952, según proyecto de Félix Sáenz Marrero, igual que en 1958. Tiene, según el Cabildo, “un valor patrimonial incuestionable, más en una ciudad como Santa Cruz de Tenerife, que, junto con Madrid y Barcelona, se erige en uno de los núcleos urbanos españoles con mayor concentración de edificios racionalistas”.

5) Inmueble número 27 de la calle de Puerta Canseco. Diseñado por Domingo Pisaca en 1934. Con lenguaje ecléctico, el Cabildo apunta que, “sin lugar a dudas, se trata de un inmueble con un valor patrimonial reconocible y de indudable exigencia de catalogación, en tanto que no son pocos los inmuebles de características similares que han sido incluidos en el catálogo municipal vigente o en el que se incorpora al documento de revisión del PGO”.

6) Inmueble número 23 de la calle de Puerta Canseco. De lenguaje ecléctico, “constituye un inmueble con un notable interés patrimonial que debiera catalogarse”, según el Cabildo.

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