Santa Cruz de Tenerife eliminará 188 aparcamientos en la calle La Rosa e implantará una Zona Verde para residentes
El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha anunciado que va a eliminar unos 188 aparcamientos públicos con la remodelación de la céntrica calle La Rosa. Para “compensar” la “importante pérdida” de plazas de aparcamiento en el mismo centro de la capital, según ha explicado en un comunicado el alcalde, José Manuel Bermúdez (Coalición Canaria), el consistorio ha comprado por 3 millones de euros un inmueble situado en el número 54 de la citada vía para destinarlo a un aparcamiento, aunque no ha detallado si será de pago.
Lo que sí ha explicado el Ayuntamiento es que, tras las obras, se implantará una Zona Verde en la citada calle para que solo puedan aparcar los residentes, mientras que el resto tendrá que abonar una tarifa.
El concejal de Hacienda y Patrimonio Municipal, Juan José Martínez, destaca que se trataría de la implantación, por primera vez en el municipio, de aparcamientos regulados con prioridad para residentes, lo que se denomina Zona Verde, para su utilización en horario nocturno, en los sectores definidos en el Plan Especial de El Toscal, ya que las 95 plazas de aparcamiento en superficie que quedan disponibles para residentes en el entorno de la calle de La Rosa no son suficientes para cubrir la demanda de 188 plazas que se verán eliminadas por la remodelación de la calle de La Rosa.
La zona verde de aparcamiento supone la configuración de un sistema de aparcamiento en superficie para uso preferente de residentes, comerciantes y vehículos autorizados, pero con restricciones horarias para no residentes.
El control de vehículos aparcados dentro de las zonas marcadas con pintura verde sobre el asfalto se realiza mediante un sistema de lectura de matrículas mediante cámaras.
Los vehículos estacionados que no cumplan la condición de residente o vehículo autorizado para estacionar podrán realizar el pago de las tarifas mediante parquímetros o aplicación móvil.
Cada vez menos aparcamientos
No es la primera obra que se realiza en el centro de Santa Cruz y que acaba eliminando plazas públicas de aparcamiento. Recientemente se finalizaron las obras en la calle Ni fú Ni Fá, en la que se perdieron unos 20 aparcamientos y una acera que permitía pasear junto al barranco de Santos.
A estas hay que sumar las decenas de plazas que fueron eliminadas en favor de las compañías que gestionan el alquiler de patinetes eléctricos, ya que se han ubicado allí los parkings para este tipo de vehículos de pago. También hay menos aparcamientos desde que se ha cedido a negocios privados, de hostelería, la posibilidad de instalar terrazas permanentes sobre la calzada. Más las que se ocupan con contenedores de basuras.
Muchos tinerfeños que visitan la ciudad, o incluso residentes en la ciudad, se ven obligados a dejar sus vehículos en los aparcamientos privados, unos negocios que en muchos casos imponen unas tarifas a los clientes más elevadas de lo establecido por la ley. Un informe encargado por el propio Consistorio en 2017 reveló numerosas irregularidades en la gestión de siete aparcamientos ubicados en el centro de la capital, tal y como ha denunciado la oposición, y en concreto, Unidas Podemos, en diversas ocasiones. El documento afirmó que las tarifas estaban entre un 16 y un 66% por encima de lo acordado por el Ayuntamiento. Pese a haber pedido formalmente a estos negocios que bajaran las tarifas, no todos lo han hecho. Tampoco se les ha sancionado ni pedido que devuelvan el dinero cobrado de más.
Además, de media pagan unos 40 euros al año por cada plaza de aparcamiento que gestionan, mientras que el mismo informe del Ayuntamiento establece que ese canon debería ser de casi 400 euros. La pérdida de ingresos para el Consistorio es, pues, de más de un millón de euros al año por las 4.100 plazas gestionadas, según Unidas Podemos.
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