El juez Alba descalifica a un testigo policial clave para incriminar a uno de los acusados del caso Faycán

El juez Alba, presidente del tribunal, junto a los otros dos magistrados de la Sala, Carlos Vielba y Oscarina Naranjo. (ALEJANDRO RAMOS)

Iván Suárez

Las Palmas de Gran Canaria —

El juicio por el caso Faycán de corrupción en el municipio grancanario de Telde se desinfla a medida que avanza. Los doce años transcurridos desde que comenzara la instrucción de la causa, las lagunas de memoria de acusados y testigos, el fallecimiento durante el proceso de otros cuyo testimonio se antojaba relevante para incriminar a algunos de los principales procesados y el arrepentimiento de 21 de los 28 encausados a cambio de una sustancial reducción de condena han rebajado el interés y la expectación por el macroproceso judicial del año en Canarias.

La sexta sesión de la vista oral, celebrada este martes, apenas ha durado media hora. Y eso que estaban citados a declarar siete agentes de la Policía Nacional que participaron en la operación. Todos ellos ratificaron, sin más, sus actuaciones en las labores de seguimiento a los investigados para obtener pruebas del pago de comisiones ilegales a cambio de adjudicaciones de obras y servicios o de un trato preferencial para cobrar facturas pendientes en distintas concejalías del Ayuntamiento de Telde.

El único momento de tensión de este martes tuvo como protagonistas a uno de los policías clave para incriminar al acusado Agustín León, ex secretario general de Ciudadanos por el Cambio (Ciuca), y al presidente del tribunal de la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas, el magistrado investigado Salvador Alba. El juez formuló preguntas a un testigo por segunda vez en lo que va de juicio (en la primera cuestionó al ex asesor de María del Carmen Castellano cuando trataba de desvincularse de la exalcaldesa de Telde). Ante las dudas manifestadas por el agente en relación con algunos hechos vinculados a la imputación de León, Alba intervino para someterle a un interrogatorio y descalificarlo como testigo.

El fiscal había citado al agente para que aclarase varias operaciones en las que intervino durante la investigación, entre ellas la vigilancia a Francisco Gordillo, asesor de la cabecilla de la trama, la ya fallecida María Antonia Torres, y a Alejandro Navarro, director general de la constructora Mazotti. Según relató el policía en fase de instrucción y ratificó este lunes, el empresario y la mano derecha de Torres se reunieron en el restaurante Cinco Jotas, en El Cortijo, para que el primero le entregase al segundo un sobre con 180.000 euros. Tras el pago de esta comisión, reconocida por el propio Navarro, el Ayuntamiento de Telde adjudicó la obra del aparcamiento de Los Picachos a Mazotti, además de resultar favorecida en el orden de cobro de las facturas.

“Antes de la comida, quedaron por teléfono. Alejandro Navarro le llamó para decirle que ya tenía el dinero. Después estuvieron hablando fuera, en el coche”, contó el testigo. Posteriormente, el agente, que actuaba en solitario, siguió al vehículo conducido por Gordillo hasta la céntrica zona de Arnao, “a la asesoría de Agustín León”, donde también se encontraba María Antonia Torres. La Fiscalía, sobre la base de la investigación policial y de las conversaciones telefónicas interceptadas, sitúa al ex secretario general de Ciuca en esta operación, como perceptor del 50% de la comisión. La otra mitad se la habría llevado la cabecilla de la trama, concejala de Obras Públicas.

El agente recordó que, posteriormente, analizando las conversaciones telefónicas, los investigadores concluyeron que Gordillo se dirigía, efectivamente, a la asesoría de León para repartirse la comisión. Aludió a una llamada de Torres ese mismo día y a la misma hora en la que le preguntaba a su asesor dónde se encontraba, aunque el testigo no pudo precisar con detalle el contenido exacto de esa conversación, excusándose en el tiempo transcurrido desde entonces.

La abogada de Agustín León, María del Mar García, aprovechó esas dudas para intentar desacreditar su testimonio y tratar de hacer ver al tribunal que la conclusión de que se dirigieron a la asesoría de León para repartirse el botín respondía más a una intuición que a hechos probados. Fue en ese momento cuando intervino el juez Alba para reconducir la declaración del agente policial y realizarle una serie de preguntas, incluso más que las formuladas por la letrada del procesado y con más insistencia, llegando a mostrar alguna sonrisa ante las respuestas dubitativas del testigo.

Entre otras cuestiones, el juez quiso aclarar si su afirmación de que Gordillo entró en la asesoría era simplemente una sospecha, si en la llamada de Torres se habló en algún momento de dinero o si tenía constancia de otras reuniones en la asesoría del secretario general de Ciuca. “Si me está preguntando si vi entrar a Gordillo en la asesoría, la respuesta es no”, zanjó el testigo policial antes de que Alba diera por concluida su comparecencia. El agente pidió en varias ocasiones poder ver las diligencias para aclarar algunos aspectos de su declaración que no recordaba. Alba se lo negó. “Haga memoria”, le dijo.

El juicio continúa este jueves con la declaración de nuevos testigos, entre ellos los exconcejales del PP José Suárez y Sonsoles Martín, propuestos por la defensa del exalcalde Francisco Valido. También están citados para la séptima sesión de la vista oral Juan Carlos Saavedra Guadalupe, exgerente de la empresa municipal del suelo y la vivienda de Telde (Urvitel), y Pedro Pablo Santana, exresponsable del departamento de Patrimonio del Ayuntamiento. Estos dos últimos, propuestos por la abogada de Agustín León, fueron condenados a penas de cárcel en el caso Grupo Europa, una pieza separada del caso Faycán.

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