No basta con levitar unos cuantos escalones por encima de la plebe -compañeros y compañeras de partido incluidos-. En ocasiones, hasta es necesario encomendarse a Santa Lucía, mayormente de Tirajana, para garantizarse la tranquilidad toda la legislatura. Le ocurre, como se imaginarán, a José Manuel Soria, presidente del Cabildo de Gran Canaria, que anda planteándose muy seriamente la posibilidad de convocar los plenos insulares el penúltimo viernes de cada mes, en lugar del último. Los motivos provienen de Santa Lucía de Tirajana, a donde ha llamado Larry, en nombre de su excelencia, para comprobar si es verdad que allí se celebran los plenos municipales los últimos viernes. Les contamos.