Existen otros textos del Che, menos conocidos, cuya lectura recomiendo para este fin de semana. El socialismo y el hombre en Cuba (marzo de 1965), Discurso de Argel (febrero de 1965), Crear dos, tres…muchos Vietnam, es la consigna (abril de 1967), Contra el burocratismo (1963), y Apuntes críticos a la economía política, redactado en 1966 pero no publicado hasta junio de 2006 por Casa de las Américas. ¿Cómo tardaron tanto? Muy sencillo. Se trata de una crítica radical al Manual de economía política de la Academia de Ciencias de la URSS. Guevara vaticina incluso el derrumbe en aquel país del socialismo realmente existente y la tendencia a la restauración del capitalismo.Estos trabajos del Che expresan un proceso de reflexión política independiente que interrumpió su muerte en octubre de 1967. Tomados en conjunto indican un intento por avanzar en la construcción del socialismo, o de otro socialismo, que de ninguna manera veía en la burocracia soviética. Como todo proceso de pensamiento inconcluso, a caballo de una actividad revolucionaria personal incansable contra el imperialismo, el Che no llegó a completar sus reflexiones sobre la relación de la planificación económica socialista con la democracia o sobre la verdadera naturaleza de la burocracia soviética y del estalinismo. No obstante, el valor de estas aportaciones queda ahí para quienes siguen interesados en algunas de las razones que llevaron a la implosión de la Unión Soviética o piensan caminos para seguir razonablemente esperanzados en un futuro mejor para la humanidad.En una explosión de indignación contra Moscú y Pekín por su política durante la guerra de Vietnam, Guevara escribió lo siguiente: “El imperialismo norteamericano es culpable de agresión. ¡Ya lo sabemos señores! Pero también son culpables los que en el momento de definición vacilaron en hacer de Vietnam parte inviolable del territorio socialista (…). Y son culpables los que mantienen una guerra de denuestos y zancadillas comenzada hace ya mucho tiempo por los representantes de las dos más grandes potencias del campo socialista (la URSS y China). Preguntemos para lograr una respuesta honrada. ¿Está o no aislado el Vietnam, haciendo equilibrios peligrosos entre las dos potencias en pugna?” Otra crítica a los paradigmas de entonces: “Persiguiendo la quimera de realizar el socialismo con la ayuda de las armas melladas que nos legara el capitalismo (la mercancía tomada como célula económica, la rentabilidad, el interés material individual como palanca, etcétera), se puede llegar a un callejón sin salida”. Sobre el arte desarrollado por el llamado realismo socialista también tenía sus propias ideas. Consideraba que esa forma de arte era la que “entienden los funcionarios”. Con ella “se pone una camisa de fuerza a la expresión artística”. Insisto. Leer estos trabajos del Che Guevara con la disculpa del aniversario de su nacimiento puede resultar muy entretenido. Porque, además de ejercer como protagonista de la revolución latinoamericana, escribía bastante bien. Muy bien, diría yo. Rafael Morales