A unos les salen las cuentas más que a otros. Pero los tres candidatos a dirigir el Partido Socialista Canario a partir del sábado están seguros de contar con los suficientes respaldos como para no retirarse antes de tiempo. Eso sí, desde que terminara el proceso de elección de delegados, cada uno de ellos se ha dedicado a consolidar posiciones, a intentar un cambio de estrategia o a ahuyentar maledicentes fantasmas. En esta última posición se encuentra José Miguel Pérez, el candidato con más teóricos apoyos, al que le cuelgan el sambenito de ser un representante del PSOE del pasado, el hombre cómodo para el PP o para CC, el candidato de Jerónimo Saavedra... Entre otras cosas, eso fue lo que le dejó caer el sábado en la terraza del Gabinete Literario el secretario general saliente, Juan Fernando López Aguilar, y Pérez le contestó contundentemente: “Llevo tres años en la misma posición, sin ceder ni un milímetro ni ante Soria ni ante el Gobierno. Fui el único que no firmó el pacto de financiación -que Saavedra sí firmó- porque sabía que engañaban a las corporaciones locales, y así ha sido”. A las pruebas se remitió.