Para aprovechar el viaje, el concejal de Hacienda dice a sus amados contribuyentes que, a pesar de esa generosidad fiscal del Ayuntamiento, éste ha sido capaz, entre otras cosas, de hacer el parque urbano y polideportivo de Las Rehoyas, que casi nos suena más que es una herencia socialista; o “la evidente mejora y modernización del servicio municipal de Limpieza Viaria y Recogida de Residuos Sólidos Urbanos”. Quietas las vacas ahí, don Curro: ¿se refiere usted, por un casual, a ese servicio que se ha privatizado, que ya nos cuesta el doble, que lleva dos años de retraso en la recogida selectiva de residuos y que tiene al borde del colapso el vertedero de Salto del Negro? Mejor nos cobra usted todo lo que nos toca pagar y pone al Ayuntamiento a cumplir con su obligación en los servicios que debe prestar por imperativo legal. Y ya presumiremos de otra cosa de aquí al 25 de mayo.