Nada, que no hay manera, que José Manuel Arnáiz está empeñado en pasar a la historia como el más expedientado de la historia del Puerto, y lo va a conseguir. Ahora le ha tocado el turno a la cantera de Roque Ceniciento, en el extremo norte de La Isleta. Decía el estudio ambiental que se trataba de una cantera que sólo podría utilizarse en el supuesto de asistir y viabilizar las obras en el Puerto de La Luz y de Las Palmas, lo que significa que se adjudicarían obras bajo el supuesto de que se extraerían materiales de allí, lo que evitaría que los precios se multiplicaran. Pero al parecer Arnáiz quiere sacar la concesión a concurso, lo que contraviene la legalidad y el sentido común, porque con la fórmula de Arnáiz nunca se hubiera aprobado la cantera. Los favoritos a la adjudicación, no lo duden es el dúo Lopesan y Satocan. Si nos hemos equivocado, rectificaremos. Si no, Arnáiz no debe estar ni en funciones, debe ser destituido inmediatamente. Para quien los conozca, no es nuestro caso, sepan que el jefe de Arnáiz, hoy en Santander, será Mariano Navas, al que nombrarán presidente de Puertos del Estado, y el jefe supremo, el secretario general de Transportes, será Fernando Palao.