Gáldar se convierte durante tres días en la capital mundial de las lenguas amaziges

A día de hoy, todavía hay personas, incluso en las universidades públicas de Canarias, que consideran que la palabra amazige define a una etnia. Para despejar cualquier duda al respecto, lingüistas de Argelia, Francia, Marruecos y España, además de expertos en antropología y arqueología, se reúnen durante tres días en Gáldar (Gran Canaria) en el simposio Amazige: historia, memoria e identidad, un evento internacional organizado por la Dirección General de Cultura y Patrimonio Cultural de Canarias, bajo la dirección científica del doctor Jorge Onrubia Pintado.

El amazige es un conjunto de lenguas y dialectos bereberes que hoy hablan en torno a 40 millones de personas en ocho países del norte de África y también en Melilla, cuya consejera de Cultura estuvo presente en la inauguración de esta cumbre internacional. Es tan amplio este espectro idiomático, que abarca un territorio mayor que Europa. En un territorio 4.500 kilómetros de este a oeste y 2.500 de norte a sur del continente africano, explicó el catedrático Kamal Nait Zerad durante la conferencia inaugural, son numerosas las etnias que conviven, desde personas absolutamente blancas, como en la Kabilia argelina, a negras de Mali o morenas de Libia o Marruecos.

Zerad, filólogo del Instituto Nacional de Lenguas y Civilizaciones Orientales (Francia), ilustró a las personas que llenaron el Teatro Consistorial de Gáldar y a las decenas que siguen el simposio por el canal de youtube de Patrimonio Cultural sobre la realidad del universo amazige, desde su origen, en el primer milenio antes de cristo, hasta la actualidad.

El tamazige es la denominación más común a día de hoy de los dialectos amaziges porque es el más hablado, principalmente en Marruecos. Según el profesor Zerad, durante el primer milenio antes de la era común “la situación lingüística era homogénea en el norte de África”, con un sustrato “libio y líbico bereber”; siglos después recibe “la influencia de la lengua púnica, con la fundación de Cartago” (en la costa del actual Túnez), posteriormente surgen los contactos con el latín, con el dominio de Roma durante unos cuatro siglos, pero la influencia más sólida se produjo con la islamización de este amplio territorio.

El devenir del amazige fue decayendo por la influencia del árabe; en Marruecos y en otras naciones, el tuareg, “el alfabeto oficial en marroquí”, se impone, pero en los años 80 del siglo pasado surgen movimientos, con huelgas y protestas como las protagonizados por miles de jóvenes de la Kabilia, y se legaliza el amazige. En la actualidad, concluyó el lingüista del Instituto Nacional de Lenguas y Civilizaciones Orientales, son numerosas las webs que amplifican esta lengua, con traductores específicos y numerosas actividades que promocionan este conjunto de lenguas milenarias. El futuro del amazige está garantizado.

El director científico del congreso también comparte la solidez actual de este conjunto de dialectos con un tronco común. El doctor Onrubia, que este jueves profundiza sobre Los primeros amazigohablantes, lingüística histórica y arqueología, afirma, tras recordar a este periódico que la lengua de los primeros habitantes de Canarias era el amazige, que “la situación lingüística actual en lo que hace a esta lengua o estas lenguas no deja de ser muy llamativa: su unicidad lingüística es sorprendente si partimos de la base de la gran variabilidad cultural de los amazigohablantes y de la hipótesis tradicional de que no han existido procesos de estandarización o koinezación (políticos, religiosos o literarios)”. Por ello, “el actual mapa lingüístico es el resultado de una evolución histórica. De dinámicas de poblamiento y de contacto cultural difíciles de rastrear”.

El profesor Rumén Sosa es un experto en Historia de la lengua amazige de Canarias, título de la ponencia que ha llevado a este simposio. Este doctor por la Universidad de Las Palmas señala que “la lengua amazige y la escritura líbico-bereber” fue el idioma y el alfabeto que trajeron del norte de África los primeros colonos del Archipiélago. Las investigaciones de Sosa “apuntan a siete dialectos en cada una de las islas que fueron habitadas”, o al menos en varias de ellas, aseveran los estudios académicos que documentan el uso de traductores durante el largo proceso de conquista de Canarias, que se prolongó prácticamente a lo largo de todo el siglo XV.

Pero la existencia de varios dialectos amaziges de las poblaciones indígenas es compatible “con un tronco común” en la lengua de los antiguos canarios. Como recuerda Rumén Sosa, “las crónicas de Viera y Clavijo, por ejemplo, son muy certeras”.

Tras esta primera introducción, el conferenciante abundó sobre las dos fases de la castellanización a la que fue sometida la población local, entre los siglos XV y XVII, con la llegada de los europeos. Por último, cerró Sosa su intervención reivindicando la necesidad “de seguir investigando y potenciando el amazige se ha perdido una mazigidad en muchas Zonas” del vecino continente.