La reforma del RIU Meloneras creará 165 puestos de trabajo

El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero (i), y los consejeros de Industria, Francisca Luengo, y de Economía y Hacienda, Javier González Ortiz (d), antes de comenzar la reunión del consejo de Gobierno. EFE/Cristóbal García

Europa Press

Las Palmas de Gran Canaria —

La reforma del hotel RIU Palace Meloneras, en el sur de la isla de Gran Canaria, conllevará la contratación de unas 165 personas una vez rehabilitado, mientras que con los trabajos de modernización se puede llegar a unos 700 empleos. Así lo ha señalado la consejera de Empleo del Gobierno de Canarias, Francisca Luengo, y un técnico jurídico de RIU que han suscrito un acuerdo que deben firmar todas aquellas cadenas hoteleras o propietarios de establecimientos turísticos de cinco estrellas que decidan emprender una reforma, y con el que se comprometen a formar y contratar al menos al 60 por ciento de personas demandantes del Servicio Canario de Empleo (SCE).

Esta condición está recogida en la Ley de Modernización y Rehabilitación Turística del Gobierno de Canarias, de tal forma que Luengo resaltó que “se apuesta por el empleo y vincula la rehabilitación de los hoteles de cinco estrellas y categoría superior”, obligando a la empresa, antes de otorgar la licencia, a celebrar un convenio con el SCE.

Los contratos serán al menos de seis meses y, en este sentido, el representante de RIU afirmó que la realidad es que los hoteles que están reformando, está conllevando un “incremento de la plantilla”. Este es el segundo acuerdo de estas características que el Gobierno regional suscribe en Gran Canaria, ya que se ha firmado otro con un propietario noruego para la rehabilitación de otro hotel en Mogán.

Por último, la consejera al ser cuestionada si es partidaria de vincular los sectores que estén saliendo de la crisis con un aumento del salario, como podría ser en el caso de Canarias el turismo, se mostró de acuerdo con este planteamiento y añadió que ella no se quiere “amparar en la crisis para los bajos salarios”, defendiendo unos sueldos “dignos”.

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