El tribunal de Perugia declara inocente a Knox
ROMA, 3 (EUROPA PRESS)
El tribunal de apelación de Perugia ha absuelto este lunes a Amanda Knox, la joven estadounidense acusada de asesinar a su compañera de piso Meredith Kercher en el llamado 'crimen de Perugia', y ha ordenado su inmediata puesta en libertad.
Tras escuchar la sentencia, Amanda ha abrazado a su hermana entre lágrimas, mientras Sollecito hacía lo mismo con sus familiares. Fuera del Tribunal, donde esperaban cientos de personas el veredicto, un grupo de personas han gritado “vergüenza, vergüenza” a los abogados de Kercher y Sollecito cuando se disponían a abandonar el tribunal.
“SOY INOCENTE”
Durante su alegato pronunciado este lunes ante el Tribunal, Knox ha asegurado que es “inocente” y que está “pagando con su vida” un delito “que no ha cometido”, al mismo tiempo que ha afirmado que nunca “ha violado, ha asesinado, ha robado” porque “nunca estuvo allí”.
Knox ha asegurado ante el jurado, hablando en italiano, que con Kercher mantenía “una buena relación” y compartían “una amistad” y ha destacado que perdió “una amiga de la forma más brutal e inexplicable posible”.
Además, la joven ha añadido que ha tenido que afrontar “acusaciones injustas, sin fundamento” y que ha sido “traicionada” y “manipulada” por las autoridades. “Quiero volver a casa, no quiero que me priven de mi futuro” ha afirmado entre lágrimas.
Finalmente, la joven ha afirmado que ambos acusados “merecen la libertad” porque no han hecho “nada para que nos la quiten”. Por su parte, Sollecito ha afirmado que “cada día en la cárcel es como la muerte” y ha destacado que “nunca ha hecho nada malo”.
LA FAMILIA KERCHER PIDE JUSTICIA
Por su parte, la madre de Meredith Kercher ha declarado en una conferencia de prensa que “necesitan saber” qué le pasó a la joven británica para tener “un poco de justicia” para ella. Según ha explicado la hermana de Kercher, Mez, la familia “tan sólo quiere la verdad” sobre el delito ocurrido en 2007.
Además, la familia ha denunciado que “toda la atención” se ha centrado en Amanda durante el proceso, mientras que Meredith “ha sido casi completamente olvidada”.
La acusación particular había pedido la cadena perpetua para ambos jóvenes en la apelación, aunque ahora estudiarán presentar un recurso ante el Tribunal Supremo italiano.
Antes de retirarse a deliberar, el presidente del Tribunal, Claudio Pratillo Hellmann, había pedido “respeto por la víctima y por los acusados” y había invitado a todos los presentes “evitar gritos de estadio” cuando se pronunciara la sentencia.
EL CRIMEN Meredith Kercher fue encontrada muerta, medio desnuda y con 43 puñaladas en el cuello en la casa que Knox y ella compartían en Perugia en el mes de noviembre de 2007. El primer acusado fue Rudy Guede, un marfileño que fue condenado a 16 de cárcel por el mismo caso. A Guede se le redujo la pena de cárcel por solicitar el juicio rápido, al mismo tiempo que se separaba su juicio del de Knox y Sollecito.
Según la primera reconstrucción de los hechos, Kercher se negó a participar en un 'juego sexual' por lo que Guede violó a Meredith y Knox la apuñaló con un cuchillo mientras Sollecito la sujetaba. No obstante, la defensa ha pedido la absolución de Knox y Sollecito porque, según afirman sus abogados, no hay móvil ni pruebas concluyentes de que los jóvenes estuvieran en el piso ésa noche.
Precisamente, Knox y Sollecito han asegurado siempre que se encontraban en casa de Sollecito, aunque tan sólo en una declaración escrita Knox afirmó que estaba en casa y que oyó gritar a Meredith desde la cocina. Knox ha afirmado en varias ocasiones que fue “presionada” por la Policía cuando escribió ésa declaración y este lunes ha reiterado que fue “manipulada” por las autoridades italianas.
Asimismo, durante las vistas de apelación, la defensa pidió repetir las pruebas de AND que inculpaban a ambos acusados y se concluyó que el AND que se encontraba en el cuchillo que asesinó a Kercher no coincidía ni con el de Knox ni con el de Sollecito. La sangre de Sollecito que se encontró en el sujetador de Kercher fue considerada como prueba no concluyente.
Además, Sollecito ha recordado durante la vista de este lunes que testificó “bajo presión” la noche del asesinato ante la Policía. Knox y Sollecito llevan cuatro años en la cárcel italiana.