A la caza del wifi y, después, del empleo

Engancha. Por mucho que intentes decir que no, es notar que no llevas el móvil encima, que se ha quedado en casa o que te avisa de que le queda nada de batería, y la ansiedad aparece. Los expertos ya le han puesto nombre a la dependencia del teléfono móvil, la nomofobia. Sin llegar a los extremos, el móvil, además de mantenernos conectados a toda hora y en todo lugar, sirve para buscar empleo. ¿Que vas caminando por la calle y pasas por delante de una empresa donde tienen publicada una oferta de empleo? ¡Perfecto! Si tienes Giwalk, un software que busca ofertas de trabajo porgeolocalización, tu perfil encaja y, por supuesto, vives en Estados Unidos, ahí tienes una oportunidad.

Sin caer en las locuras americanas que pronto llegarán a España, a través del smartphone se pueden buscar ofertas de trabajo. Casualjobs es una aplicación para encontrar trabajo con notificaciones al móvil y sin tener que ir registrándose en distintas ofertas. El diario El Mundo lo ha bautizado como el 'Meetic' de los trabajos.

Más mundanal pero no por ello menos eficaz, Workea es una bolsa de trabajo para personas de media y baja cualificación. Su callejero fotográfico de Workea localiza y publica las ofertas para que lleguen a sus 300.000 usuarios en tiempo real. Además, las primeras 500 fotos de ofertas reciben como remuneración 2 euros. Si ves un cartel tipo “se busca?”, foto con el móvil y 2 euros asegurados. Algo es algo.