Con tremendo swing leo por ahí cómo el ministro de Agricultura viene a La Palma a decirnos con tremendísimo swing que debemos centrarnos en la reconstrucción. Bueno, se me ocurre que tal vez el Ministerio debería dar ejemplo siendo los primeros en ponerse a sorribar el malpaís. De todos modos agradezco al ministro que nos recuerde lo de “centrarnos en la reconstrucción”, por si a alguien con responsabilidades en el tema se la ha olvidado, que nunca está de más que se nos recuerde todo lo que queda por reconstruir, retóricas aparte, que lo primero que tienen que reconstruir los políticos es un lenguaje creíble, que ya no estamos para milongas, y recuerdo aquella escritora francesa que dijo que había votado a Mitterrand simplemente porque había explicado con claridad la crisis, es decir, lo mal que estaban los transpirenaicos en ese momento. Le votó por decir la verdad. Y que conste que Mitterrand ya era calvo antes de decir la verdad, el pelo no se le cayó por eso. Y es que se acercan los comicios primaverales, y en esta bella primavera palmera los candidatos han brotado de todas partes, de los lugares más insospechados, como las flores que nunca antes habían florecido tanto. No me canso de repetir que la biodiversidad política es una de las virtudes de la democracia, y amo la biodiversidad, pero estimados candidatos, tampoco hay que pasarse, que esto no es la Transvulcania, que todos quieren correr, pero no todos tienen fuelle para acabar, y es más fácil recuperarse de la Transvulcania que de un revolcón político, que para eso no hay fisioterapia que valga. Avisados están. Suerte y que la fuerza les acompañe.