El Casco Histórico propone que la estación de bombeo se desplace hacia el Puerto
La Junta Directiva de la Asociación de Empresarios del Casco Histórico de Santa Cruz de La Palma rechaza frontalmente la ubicación elegida por el Ayuntamiento para construir la estación de bombeo de la red de saneamiento, que se proyecta en la plaza de Blas Pérez, y propone que se desplace unos 80 metros hacia el interior del Puerto, a la zona que se utiliza actualmente para el estacionamiento de vehículos de alquiler, según expuso este viernes en rueda de prensa Juan Arturo Sangil, presidente del colectivo empresarial, quien aclaró desde un primer momento que “somos empresarios y no políticos”.
La convocatoria de prensa, precisó Sangil, “está consensuada con todos los empresarios del Casco Histórico, ya que en una reunión mantenida en la noche de este jueves acordamos rechazar la ubicación de la estación de bombeo”, a la que ya se ha bautizado como 'Plaza del Cagajón' o 'Mamotreto'.
(Recreación de la estación que propone el Casco Histórico en el Puerto).
Los empresarios del Casco Histórico abogan por “buscar un alternativa; no queremos que se paralice la obra de la playa y siempre hemos solicitado que se actuara lo antes posible en los trabajos de saneamiento porque el comercio de Santa Cruz de La Palma está sufriendo bastante con este proyecto”, aseguró Sangil. “Tratamos de reactivar la ciudad con la futura playa y no pretendemos ser un obstáculo para su desarrollo”, añadió.
La ubicación y diseño de la estación de bombeo, según Sangil, no solo es rechazada por el colectivo empresarial sino también por los ciudadanos. Después de una reunión con técnicos del Ayuntamiento, arquitectos e ingenieros especialistas en el tema, y con el pertinente asesoramiento jurídico, el Casco Histórico ha presentado una “alternativa viable” que consiste en desplazar la estación de bombeo entre 75 y 80 metros hacia el Puerto y levantarla en el espacio que ahora está destinado a zona de aparcamiento de vehículos de alquiler. Por tanto, resaltó Sangil, “la Autoridad Portuaria tiene la solución a la estación”. Recordó que la Ley de Costas prohíbe construir dentro de sus límites, pero no ocurre así en el Puerto.
La propuesta del Casco Histórico consiste en “sustituir el mamotreto de la rotonda” por una construcción rectangular junto al muro del Puerto con un diseño basado en el estilo de las antiguas fortificaciones que dominaban el litoral capitalino, concretamente en el Castillete. Esta estación estaría dotada de un mástil en el que se instalaría un sistema de desodorización para que los malos olores “salgan en altura y no se perciban en la ciudad”, detalló Sangil, quien insistió en que “no podemos permitir este mamotreto en la entrada de la ciudad”.
El presidente de los empresarios del Casco Histórico criticó que el proyecto de la estación de bombeo no se hubiera dado a conocer antes tanto a los empresarios como a los ciudadanos, que no han tenido la posibilidad de presentar alegaciones. Sangil no es partidario de que se paralice el proyecto, pero considera que “es mejor esperar unos meses y hacerlo bien que no que salga mal por las prisas”.
Sangil también planteó otro asunto de relevancia que puede afectar a la construcción de la estación de bombeo si finalmente, como está previsto, se levanta en la plaza Blas Pérez. “Bajo la rotonda se localiza el antiguo Castillo de San Miguel, y si al hacer las excavaciones se encuentran restos, esto podría producir una paralización de las obras”, recalcó. Pero además, añadió, la zona afectada por la obra está dentro de la delimitación del casco histórico y, por tanto, “no se permite en ella ningún tipo de construcción que no sea previamente aprobada por Patrimonio”, resaltó Sangil. “No queremos que se paralice la obra, pero sí que se cumpla con la legalidad, que se busquen alternativas y que se acabe la playa”, agregó.
Los empresarios defienden “el diálogo” y proponen que el Ayuntamiento “negocie con Puertos para cambiar la estación de sitio”. Sangil hizo alusión a una estación de estas mismas características que se construyó en Gran Canaria y que tuvo que trasladarse de lugar porque “generaba problemas”. Se cuestionó, por otro lado, “si la obra cuenta con la autorización del Consejo Insular de Aguas”.
El presidente del Casco Histórico lamentó que hayan tenido conocimiento del proyecto “hace una semana”. En este sentido dijo que ni el Ayuntamiento ni Costas “han estado finos en la comunicación con empresarios y ciudadanos” a los que no se les ha permitido presentar alegaciones al proyecto.
Sangil fue contundente al afirmar que “no vamos a permitir que la estación de bombeo se ubique” en la plaza Blas Pérez. “Tienen la posibilidad de rectificar antes de que empiece la obra”, concluyó.