Gobierno y PP se culpan de la imponsibilidad de llegar a un consenso
El Gobierno y el PP reafirmaron este martes sus profundas diferencias en la lucha antiterrorista y se culparon de la imposibilidad de llegar a un consenso en esta materia, un día después del pleno del Congreso en el que José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy mantuvieron un duro enfrentamiento.
El Gobierno consideró este martes que Mariano Rajoy “rompió ayer (este lunes) todos los puentes” de colaboración con el Ejecutivo en materia de lucha antiterrorista, en tanto que el presidente del PP dijo que “es muy difícil entenderse con quien no tiene una posición sobre nada”.
Fuentes del Ejecutivo consultadas explicaron este martes que con su intervención ante el pleno Rajoy “pretendió dañar a José Luis Rodríguez Zapatero, pero acabó dañando al país”.
Después de que Zapatero anunciara este lunes la convocatoria del Pacto Antiterrorista y de otra reunión con todos los grupos parlamentarios para intentar lograr un “gran consenso” frente a ETA, fuentes del Gobierno advirtieron de que la discrepancia política en la lucha antiterrorista “no da más votos, sino más sufrimiento”.
“Es evidente que el Partido Popular no quiere ayudar al Gobierno en la lucha antiterrorista, y Rajoy pretendió dañar al jefe del Ejecutivo pero acabó dañando al país”, añadieron.
Del Ejecutivo habló el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, quien afirmó que hay que apartar el terrorismo de la lucha electoral, y los ministros de Trabajo y Fomento, Jesús Caldera y Magdalena Álvarez, respectivamente, que criticaron la “estrategia de destrucción” de los populares.
Por el contrario, el PP criticó que el presidente del Gobierno “no explicara” ayer su política antiterrorista y le reprochó su “absoluta falta de claridad” en sus propuestas y en su formulación, según informaron fuentes del PP consultadas.
Rajoy: “Es muy difícil entenderse con quien no tiene una posición sobre nada”
Además, en declaraciones a Onda Cero, Rajoy dijo que “es muy difícil entenderse con quien no tiene una posición sobre nada”, recalcó que para ser presidente del Gobierno “debería exigirse algo más que tener 18 años y ser español” e insistió en que la obligación de Zapatero “es gobernar y no hacer frases para la galería”.
Aseguró que acudirá al Pacto Antiterrorista “con medidas muy concretas”, como la ilegalización del PCTV, que Batasuna no se pueda presentar a las elecciones municipales, la retirada de la resolución aprobada en 2005 en el Congreso, la defensa en el Tribunal de Estrasburgo de que Batasuna es ilegal y que se den instrucciones al fiscal para la apertura de juicio oral contra Egunkaria.
También la ilegalizada Batasuna habló por boca de su portavoz Arnaldo Otegi, quien aseguró que el anuncio de ETA de que mantiene el alto el fuego, así como la posibilidad de atentar, genera “confusión” en ciertos “sectores” de la izquierda abertzale, que consideran que la eventualidad de nuevos atentados “resta credibilidad” al alto el fuego.
Desde el PSOE, su secretario de Organización, José Blanco, afirmó que su partido “no va a olvidar en el futuro el comportamiento del PP” y que quedará “en las raíces” de sus “sentimientos más profundos”, porque “no tiene límites” en su estrategia de desgaste.
En esa misma línea el portavoz del PSOE en el Congreso, Diego López Garrido, manifestó que su partido no pondrá condiciones al PP ni le obligará a “rectificar” para sumarse al nuevo pacto contra el terrorismo propuesto por Zapatero.
El líder de IU, Gaspar Llamazares, aseguró que su formación “neutralizará” cualquier iniciativa parlamentaria del PP en materia antiterrorista cuyo fin sea ahondar en la confrontación política.
La portavoz del gobierno vasco, Miren Azkarate, opinó que, tal y como planteó este lunes Zapatero, es necesario “un amplio consenso contra el terrorismo”, aunque precisó que debería ser “nuevo”, sin recurrir a “recetas fracasadas como la ley de partidos”.
El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, consideró que tras el debate de este lunes “quien realmente salió triunfador es ETA y sólo ETA”, y calificó de “excesivamente dura” la intervención del líder del PP, en tanto que el presidente de este partido, Artur Mas, dijo que a Zapatero “lo hace bueno la oposición radical y poco constructiva del PP”.
El portavoz de ERC en el Congreso, Agustí Cerdá, opinó que Rajoy “se ha pasado mucho más de tres pueblos” al decir que para ser presidente del Gobierno deberían exigir algo más que ser mayor de 18 años y español, y cree que su actitud demuestra que “está más echado al monte que nunca”.
El líder de Ciutadans-Partido de la Ciudadanía, Albert Rivera, se ofreció para “tender puentes entre Gobierno y oposición” y para propiciar una “conciliación entre el PP y el PSOE”, un papel mediador que, a su juicio, no puede jugar CiU.
