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Gestos de candidatos: hablan más que sus palabras

Televisión Española y Radiotelevisión Canaria ofrecerán sendos debates de los candidatos a la Presidencia de Canarias, con la participación de CC, PP y PSC. Un aspecto clave en estos debates, y en general en toda la comunicación política, son los gestos, lo que se denomina la comunicación no verbal.

Una persona puede decir en nuestra lengua unas 150 palabras, pero puede percibir y comprender 300 palabras, justo el doble de las pronunciadas. En nuestra comunicación interpersonal pasamos un 50% del tiempo prestando atención a la comunicación verbal y otro 50% a la comunicación no verbal.

Una mirada no siempre centrada, gestos dubitativos o nerviosos de alguno de los candidatos, la inusual cantidad de papeles que se consulta sobre la mesa para acusar o responder al contrincante... son algunos de los aspectos que reflejan más información sobre el sujeto que el contenido del discurso en sí.

La actitud, los gestos, la conducta y las emociones, delatan a un orador, por mucho que éste quiera ocultar su nerviosismo, altivez o falta de respeto por su contrincante. Y pueden hacerle ganar o perder. El movimiento constante con las manos, el parpadeo, o el titubear, mostrarse inseguro con la actitud, que no con las palabras, dicen mucho más de un candidato que la exposición de un gran número de datos.

Los actores políticos, al conceder declaraciones o entrevistas en medios televisivos, sin duda interfieren en el subconsciente de la audiencia con el discurso y los movimientos gesticulares de las manos que acompañan y regulan el ritmo del discurso oral, siendo esta una herramienta de cercanía con la audiencia.

Apliquemos estas ideas y tomemos como ejemplo la comunicación no verbal de un político como Ricardo Melchior. El conjunto de sus gestos expresa un excelente vínculo de cercanía con la audiencia a través de una imagen espontánea y de la posición de sus manos abiertas. El contacto visual de su mirada es carismático y equilibrado con las audiencias, los periodistas y las cámaras. Melchior posee una buena expresión corporal que le permite mantener una imagen impecable y de gran firmeza en su acción política. Los gestos de su expresión facial son formales y diplomáticos, que favorece a su imagen positiva y emotiva.

Es indudable que muchos otros políticos canarios cuentan con destrezas de comunicación no verbal naturales importantes, que han potenciado en las escuelas de formación de telegenia que las grandes formaciones poseen, conscientes de que los gestos de los líderes muchas veces hablan más que sus palabras.

Enrique Fárez, periodista, consultor político y empresario, en www.enriquefarez.com

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