Música en la campaña electoral

La música es un elemento fundamental en la publicidad política, mucho más de lo que posiblemente se crea. La competencia publicitaria es enorme y con mensajes perecederos y temporalmente limitados hay que cautivar al público y conseguir el máximo recuerdo del anuncio, que ha descendido en los últimos años desde el 20% hasta el exiguo 2%. Por ello, y según las estadísticas, el 97% de anuncios de televisión contienen música.

La función principal de la música es resaltar la estructura narrativa creando un sentido de desenlace. Los valores asociados a la música suponen una herramienta muy valiosa a la hora de contar una historia breve, como en el caso de la cuña o spot publicitario. Mucho ha llovido desde los viejos himnos de partido, de los que todavía quedan vestigios en actos donde se canta, por ejemplo, La Internacional.

Coalición Canaria es la formación en las Islas que mejor se mueve en la comunicación musical, quizás por carecer de las rigideces que las formaciones nacionales -PSOE y PP- imponen a sus estructuras locales, que sólo tienen margen para versionar la melodía principal, por ejemplo con la introducción de instrumentos locales, como es para nosotros el timple

Pero si hay una modalidad que está alcanzando importancia en los últimos años es la de la utilización de temas ya conocidos, arrinconando a los himnos o jingles de los partidos. A nivel internacional, Bill Clinton recurrió -ya en 1992- a Don't Stop de Fleetwood Mac (traído significativamente por Carolina Darias en estas elecciones, donde intenta imprimir un sello personal), o el caso de Hillary Clinton en 2008, con un tema de Celine Dion.

Es ahí donde CC ha sabido escoger con gran acierto sus temas musicales. En esta campaña sus candidatos están utilizando el tema Viva la Vida de Cold Play, mientras que en el pasado emplearon Color Esperanza de Diego Torres, temas ambos inspiradores y optimistas.

Llama la atención cómo los candidatos de CC en Gran Canaria se han desmarcado de esa estrategia, bien con versiones del himno de CC bien con músicas menos dinámicas que la tinerfeña, como sucede ahora en 2011.

Cada vez es más frecuente que cantantes o grupos poco conocidos, incluso ciudadanos anónimos, creen composiciones de carácter popular para apoyar al candidato, que llega a difundirlas desde su propia web. En España, colectivos vinculados a la inmigración han compuesto temas de estas características como muestra de apoyo a un líder.

Estas acciones, más o menos dirigidas desde el partido, quieren dan a entender que “el pueblo” está con el candidato y, en función del mayor acierto u originalidad de los temas, pueden incluso alcanzar cierta relevancia en la campaña. Impagable el vallenato para Rajoy en 2008 (“Vamos Rajoy, Mariano Rajoy y el Partido Popular contigo estoy”).

Enrique Fárez, periodista, consultor político y empresario, en www.enriquefarez.com

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