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Cáritas prevé agotar sus fondos de ayuda de emergencia antes de que acabe agosto

El obispo de la Diócesis de Canarias, Francisco Cases (d), y el director provincial de Cáritas, Pedro Herranz, presentaron el balance de actuación de Cáritas durante 2014. (EFE/Elvira Urquijo A.).

Efe

Las Palmas de Gran Canaria —

Las organizaciones de Cáritas en Canarias prevén agotar sus fondos de ayuda de emergencia de todo el año antes de fin de agosto ante la persistencia de los efectos de la crisis entre la población, que no han cesado pese a los mensajes de crecimiento económico, según han asegurado este jueves.

“A lo largo de los últimos meses hemos escuchado voces optimistas que dicen que hay mejora en los indicadores económicos”, pero “la realidad de nuestra sociedad, la que vive Cáritas cada día, difiere de manera notable de estas afirmaciones”, ha asegurado en nombre de Cáritas su director en la provincia de Las Palmas, Pedro Herranz.

“En Cáritas constatamos diariamente que esta supuesta mejora de la economía no repercute en la calidad de vida de las personas a las que acompañamos”, ha insistido Herranz con motivo de la presentación del balance de actuación desarrollada por su organización en 2014, cuando su asistencia llegó en todo el archipiélago a unos 60.000 beneficiarios.

Esas personas recibieron la asistencia de Cáritas a través de unos 20.000 solicitantes directos que luego la distribuyeron en unidades familiares integradas por una media de tres miembros, ha detallado la secretaria general provincial de la organización, Fátima Díaz, que ha afirmado que esas cifras son similares a las de 2013 y constatan que la situación social no ha mejorado.

Déficit de 115.981 euros

“Los datos que presentamos corresponden a 2014, año en que los indicadores registraban una mejora de la situación económica del país, mientras en Cáritas nos encontrábamos con una realidad social que no apuntaba a dicha mejora”, han sido las palabras de Fátima Díaz, que ha sostenido que tampoco tienen perspectivas más positivas para 2015.

Puesto que, “a estas alturas del año, Cáritas Diocesana de Canarias (cuyo ámbito de actuación es la provincia de Las Palmas) tiene ya una previsión de déficit de 115.981 euros” que se calcula que aumentará con el paso de los meses hasta alcanzar o superar los 301.000 euros en que se situó a final de 2014, sobre un presupuesto total de gastos que fue de algo más de 6,7 millones, ha dicho.

En el capítulo de ingresos de 2014, cuantificado en 6.445.556,04 euros, un 44 % de los fondos fue aportado por subvenciones públicas y el resto se recaudó mayoritariamente entre donativos en especie (16 %), ingresos de las organizaciones parroquiales de Cáritas de la provincia (14 %), donativos generales (11 %) y cuestaciones puntuales, conforme a los números hechos públicos hoy.

Números que el obispo de la Diócesis de Canarias, Francisco Cases, ha querido recalcar que constatan que en los llamados años de la crisis, de 2007 a 2014, las aportaciones de particulares se multiplicaron casi por tres, merced a “una reacción espontánea” de solidaridad, mientras que las de las instituciones crecieron solo un 11 %.

Del apartado de gastos de su organización, Fátima Díaz ha detallado que las mayores cuantías se destinaron a programas y proyectos, que coparon un 59 %, y a donativos en especie, que supusieron un 15 %.

Díaz ha explicado que, en la lista de motivos por los que la gente se dirige a pedir auxilio a Cáritas en Canarias, “la necesidad de alimentos sigue siendo la más significativa, aunque ha bajado ligeramente respecto al año anterior”, pero que también hay otras, como la demanda de acompañamiento o de asesoramiento y orientación laboral. Estas, al contrario que la primera, han aumentado.

Su conclusión ha sido que, en el archipiélago, “la crisis está convirtiendo la pobreza en intensa, extensa y crónica” y que la falta de una mejora social equiparable a la de los parámetros macroeconómicos demuestra que la causa fundamental de la desigualdad en las islas es “el modelo económico” existente.

Un modelo que hay “oportunidad de revisar” con la mejora económica, ha defendido Pedro Herranz, que ha tachado de “muy graves” hechos como que en las islas “haya 580.000 personas bajo el umbral de la pobreza” o que “el 68 % de los canarios no pueda afrontar un gasto imprevisto” debido a sus carencias.

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